
Alexander Pancoe, un experimentado montañista de 39 años, falleció el domingo por la noche en el Campamento 2 del Makalu, la quinta montaña más alta del mundo, según confirmó su organizador de expedición, Iswari Paudel de Himalayan Guides Nepal, según reportó CBS News.
Pancoe había descendido tras una rotación de aclimatación hacia el Campamento 3 cuando comenzó a sentirse mal, dijo Paudel a la agencia de noticias AFP. Su muerte marca el segundo deceso en lo que va de la temporada de escalada en el Himalaya.
La tragedia ocurrió a una altitud de aproximadamente 8.485 metros el domingo por la noche. El organizador de la expedición informó que ya se están realizando esfuerzos para recuperar el cuerpo de Pancoe
The Associated Press (AP) confirmó que el escalador de Chicago sufrió un paro cardiaco mientras descendía del campamento tres al campamento dos de la montaña.

Su pérdida ha generado un profundo pesar tanto en la comunidad de alpinistas como entre quienes seguían su causa benéfica.
Pancoe, graduado de la Universidad Northwestern, no solo era conocido por sus habilidades en el montañismo sino también por su resiliencia y altruismo. Había sobrevivido a un tumor cerebral en su juventud y, posteriormente, superó un accidente casi fatal en 2018, cuando una roca se desprendió mientras escalaba. Aquel incidente le causó lesiones graves en una pierna y congelamiento en los dedos, pero logró arrastrarse hasta encontrar señal telefónica y fue evacuado en helicóptero, publicó CBS Chicago.
Su trayectoria en el alpinismo alcanzó un hito al completar el Explorer’s Grand Slam, desafío que exige escalar las cumbres más altas de cada continente y esquiar hasta los polos Norte y Sur. Pero su última expedición tenía un propósito mayor: recaudar fondos para el programa de cáncer infantil del Hospital de Niños Lurie, en Chicago. Pancoe había reunido ya un millón de dólares destinados a financiar ensayos clínicos y otras iniciativas de tratamiento.
“El legado de Alex se define por su extraordinario coraje, generosidad sin límites y su inquebrantable compromiso con mejorar las vidas de niños y familias que enfrentan graves desafíos de salud“, expresó el hospital en un comunicado citado por CBS News.
Además de sus logros deportivos y filantrópicos, Pancoe mantenía un vínculo personal con los pacientes a quienes ayudaba. En 2019, dedicó su ascenso al Everest a Serena Lewis, una adolescente que también había superado un tumor cerebral con el apoyo de los médicos del hospital Lurie. “Va a ser un gran desafío para mí —escalar a gran altitud ya es bastante difícil sin una enfermedad crónica— pero espero estar a la altura”, escribió Pancoe en su página web Peaks of Mind.
La actual temporada de escalada en Nepal, que alberga ocho de las diez montañas más altas del mundo, ya ha visto otro fallecimiento. Un montañista austriaco murió el mes pasado tras descender del Ama Dablam, lo que subraya los riesgos persistentes de estas expediciones. Según cifras oficiales, Nepal ha otorgado cerca de 500 permisos de ascenso esta temporada, incluidos 214 para el Everest.
Mientras continúan los esfuerzos para recuperar el cuerpo de Pancoe, su legado de superación y compromiso social perdura entre la comunidad montañista y las familias beneficiadas por su incansable labor humanitaria.
La temporada de alpinismo en Nepal comenzó en marzo y terminará a finales de mayo, cuando la escalada se complica por culpa de los monzones, según AP.