
La familia Brewer, originaria de Carolina del Sur, inició una demanda contra Delta Air Lines tras descubrir que videos sexuales explícitos, presuntamente grabados por un trabajador vinculado a la aerolínea, aparecieron en su cuenta de iCloud luego de extraviar un iPad propiedad de uno de sus hijos durante un vuelo internacional.
El reclamo, presentado en el Tribunal de Distrito de Carolina del Sur el 16 de julio, nombra como responsables legales a Delta Air Lines y a Unifi Aviation, una firma de servicios aeroportuarios parcialmente controlada por Delta. El caso ha generado preocupación sobre la seguridad y la integridad en el manejo de objetos perdidos por parte de las aerolíneas y sus proveedores.
De acuerdo con la demanda, Brooke y Tory Brewer volaron con sus dos hijos el 19 de julio de 2023 desde Charleston a Nueva York antes de abordar una conexión hacia Londres. Al arribar al Reino Unido, la familia detectó la ausencia del iPad infantil, identificado por una funda de Peppa Pig color rosa, que había sido olvidado en el primer tramo del viaje. Poco después, la familia empezó a recibir una serie de notificaciones y mensajes respecto al dispositivo perdido.
Tras percatarse de la desaparición del dispositivo, Brooke Brewer utilizó la función “Find My” de Apple, logrando ubicar el iPad en el distrito de Queens, en la ciudad de Nueva York, según consta en la denuncia. Posteriormente, la cuenta de iCloud de la familia comenzó a recibir fotografías tipo selfie de un individuo con uniforme y credenciales de Delta Air Lines. Las imágenes dispararon las alarmas en el hogar, ya que fue posible visualizar tanto el atuendo identificativo de la aerolínea como la placa del trabajador.
Poco más de un mes después, el 27 de agosto, la situación escaló aún más. Se incorporaron al respaldo digital de la familia videos porno en los que el mismo individuo que aparecía en los selfies realizaba actos sexuales vistiendo el uniforme y la credencial de Delta. La situación se agravó el 3 de septiembre, cuando otro video de carácter sexual se añadió a la cuenta de iCloud.

La familia Brewer reportó formalmente la pérdida del dispositivo a Delta Air Lines el 20 de julio, un día después del incidente, y repitió la denuncia el 27 de agosto tras descubrir el contenido explícito en su cuenta. Durante el lapso entre el 27 de agosto y el 3 de septiembre, la única respuesta recibida por parte de la compañía fueron correos automáticos sin remitente en los cuales se informaba genéricamente que la empresa seguía buscando el dispositivo. Las respuestas automáticas no ofrecían detalles ni avances específicos sobre la investigación, lo que aumentó la frustración y el malestar de los afectados.
Además del acceso a la cuenta de iCloud y la publicación de archivos explícitos, la demanda sostiene que la persona vinculada al caso accedió a la cuenta familiar de iTunes y creó nuevos perfiles, así como un usuario con la etiqueta “Gay” en Amazon, lo que implica una intrusión mayor en la privacidad digital de los demandantes.
Brooke Brewer manifestó a Newsweek que la experiencia resultó completamente inesperada y traumática para la familia. Expresó que su intención al hacer público el caso es generar conciencia y evitar que otras familias sufran circunstancias similares. “Esta experiencia ha sido horrorizante y algo que nunca imaginamos. Compartimos nuestra historia para evitar que otras familias vivan algo similar”, señaló Brooke Brewer en conversación con el citado medio.
Por su parte, Delta Air Lines informó a Newsweek que el individuo acusado no pertenece directamente a la plantilla de la aerolínea, sino que trabaja para una empresa tercerizada, sin brindar el nombre de esta compañía. Un vocero de Delta subrayó que la aerolínea mantiene una política de tolerancia cero frente a cualquier conducta ilegal, aunque declinó hacer más comentarios por tratarse de un proceso judicial en trámite. A su vez, Newsweek confirmó que contactó a Unifi Aviation, la empresa tercerizada referida, pero hasta el momento de la publicación no se había recibido respuesta.

En el documento legal, los Brewers solicitan una compensación económica que abarque el daño psicológico y emocional sufrido, junto con el reembolso de los gastos y pérdidas que atribuyen al incidente con el iPad. El texto de la demanda enfatiza la exposición a este tipo de contenido, unido al acceso no autorizado a cuentas personales y la falta de respuesta efectiva, ha producido un estrés considerable y una afectación duradera para la familia.