La agencia de calificación de riesgo crediticio Moody’s anunció este viernes que mantuvo la calificación soberana de Francia en Aa3 (deuda de buena calidad), evitando así la rebaja de nota que se preveía tras las decisiones recientes de Standard & Poor’s (S&P) y Fitch. Sin embargo, la agencia modificó la perspectiva del país de “estable” a “negativa”, advirtiendo sobre los crecientes riesgos relacionados con la estabilidad política y la gobernanza en el país europeo.
A través de un comunicado, Moody’s justificó el cambio en la perspectiva citando el “riesgo incrementado de que la fragmentación del panorama político del país siga perjudicando el funcionamiento de las instituciones legislativas francesas”. La agencia señaló que la persistente inestabilidad política podría limitar la capacidad del Gobierno para abordar desafíos clave como el déficit fiscal elevado, el crecimiento de la deuda pública y el aumento de los costes de financiación, lo que aumentaría la probabilidad de un deterioro más rápido de los principales indicadores fiscales.
En las últimas semanas, tanto S&P como Fitch optaron por rebajar la calificación de la deuda soberana de Francia. Fitch degradó su nota en septiembre, disminuyéndola de AA- a A+, mientras que S&P siguió el mismo camino hace una semana, reduciendo la puntuación desde AA-/A-1+ hasta A+/A-1.
A diferencia de esas acciones, Moody’s explicó que mantiene la nota en Aa3 debido a la “significativa fortaleza económica de Francia” y la robustez de su economía, así como al hecho de que cuenta con instituciones públicas competentes, aunque bajo presión.
La agencia advirtió que la fragmentación política podría favorecer una “reversión duradera de las disposiciones clave de las reformas estructurales adoptadas anteriormente, en particular la reforma de las pensiones de 2023”, cuya suspensión fue tramitada recientemente por el primer ministro Sébastien Lecornu tras alcanzar un acuerdo con la oposición socialista. Moody’s alertó de que una paralización prolongada de dicha reforma agravaría los problemas fiscales y afectaría negativamente la tasa de crecimiento potencial.
Imagen de archivo de una sesión de la Asamblea Nacional de Francia en París (AP foto/Thibault Camus)En relación a la calificación, la agencia consideró que la solidez de los balances de los hogares y empresas, así como la estabilidad bancaria, contribuyen a la resiliencia macroeconómica de Francia y su capacidad para absorber crisis financieras. No obstante, prevé un debilitamiento progresivo de la asequibilidad de la deuda a medida que la refinanciación se produzca a tipos de interés más elevados, partiendo aún de niveles considerados sólidos.
La publicación de este análisis de Moody’s coincidió con el inicio de los debates en la Asamblea Nacional sobre el proyecto de presupuesto para 2026, liderado por Lecornu. El gobierno, que carece de mayorías claras, enfrenta la necesidad de negociar apoyos tanto a la derecha como a la izquierda para sacar adelante la ley presupuestaria que debe afrontar el elevado déficit previsto de 5,4% del PIB para 2025 y el compromiso de reducirlo por debajo del 3% en 2029.
Según enfatizó el ministro de Finanzas francés, Roland Lescure, en sus redes sociales, la decisión de Moody’s “demuestra la necesidad de construir un camino hacia un compromiso presupuestario”. Lescure reafirmó que el Ejecutivo mantiene el objetivo de reducir gradualmente el déficit, preservando el crecimiento económico.
En los debates parlamentarios, mientras el Gobierno busca apoyos necesarios, los socialistas han condicionado su aval al presupuesto a medidas como el aumento de impuestos para los sectores más ricos, tras haber logrado la suspensión de la reforma de las pensiones como parte del acuerdo para evitar mociones de censura. La supervivencia del actual Ejecutivo depende en gran medida de la aprobación de estos presupuestos y de la capacidad para consolidar alianzas en un Parlamento profundamente dividido.
En la actualidad, la deuda pública francesa ronda los 3,4 billones de euros, equivalente al 115,6% del PIB, situando a la segunda economía de la Unión Europea bajo una presión notable tanto desde los mercados como desde los organismos internacionales de análisis crediticio.
(Con información de AFP y EFE)
hace 11 horas
1








English (US) ·
Spanish (ES) ·