
Durante una entrevista en la reciente Comic Con realizada en los Emiratos Árabes, Andrew Garfield respondió si volvería a ser el famoso arácnido.
El nominado al Oscar ya interpretó a Spidey en tres ocasiones, lo que le mereció varios elogios. La primera fue en The Amazing Spider-Man (2012), The Amazing Spider-Man 2: Rise of Electro (2014) y finalmente aparece como un melancólico Peter Parker junto a Tobey Maguire y Tom Holland en Spider-Man: No Way Home (2021).

El gran trabajo que ha hecho como el amigable vecino de Nueva York hace que los fans tengan altas expectativas sobre una posible participación en Avengers: Doomsday o futuros proyectos del Universo Cinematográfico de Marvel.
“Tendría que ser algo muy raro”, respondió Garfield sobre si volvería a ser el Hombre Araña. “Me gustaría hacer algo muy peculiar. Algo único, original y sorprendente, como la libertad creativa que tienen en las películas animadas de Spider-Verse”, comentó el interprete haciendo referencia a la película animada Spider-Man a través del Spider-Verso (2018) que cuenta la historia de un hombre araña alternativo.

No es la primera vez que Garfield habla de regresar al papel que lo lanzó al estrellato. El pasado octubre habló con la revista GQ sobre la posibilidad de interpretar de nuevo el papel. “Sin duda, volvería al 100 por ciento, su fuera lo correcto”.
Andrew agregó para GQ que no dudaría en volver a interpretar al arácnido “Bajo las circunstancias adecuadas, si se integra a la cultura, si hay un concepto genial o algo inédito que sea único, peculiar y emocionante, algo que enganche”.
“Me encanta ese personaje y me hace feliz. Si llevo alegría interpretándolo entonces también la recibo” finalizó.
El actor de 41 años recientemente habló sobre cómo ha sido su vida, se refirió al reto que representó pasar de estar en el estrellato por su papel como Spider-Man a buscar papeles más complejos que lo desafíen emocional y espiritualmente.
Esta faceta reflexiva de Garfield surge a raíz de que perdió a su mamá Lynn en 2019 después de una dura batalla contra el cáncer pancreático.
“Cuando mi mamá murió sentí que mi ambición moría con ella” afirmó Andrew.

En una entrevista con Esquire, Garfield habló sobre la aprobación social, su relación con su mamá y la obsesión con la fama.
“Había trabajado tanto y recibí tanto amor por ello, que sentí una sensación de satisfacción que no había experimentado antes. Y eso me preocupó”. Meditó sobre eso y de la inquietud que le producía pensar que había llegado a la cúspide y que podría perder su creatividad.
Andrew descubrió que las ideas de vacío eran un reflejo de sus sentimientos encontrados con la fama y la desconexión que produce la adoración que reciben las celebridades.

“Vivimos en un sistema que nos aleja del amor real, de la conexión humana genuina” se lamentó.
Recordó que su madre era ese vínculo con lo espiritual en su vida que le ayudaba a apreciar lo esencial sobre lo superficial.
“Mi madre era una gran apreciadora de lo invisible, de esas pequeñas bondades y milagros que nos rodean”, dijo con nostalgia.