
La empresa de cruceros Royal Caribbean ha decidido suspender todas las visitas programadas a su puerto privado en Labadee, Haití, hasta por lo menos abril de 2026 debido a los riesgos de seguridad provocados por el aumento de la violencia, los secuestros y la inestabilidad en el país. Esta medida impacta en miles de pasajeros y en la operación turística de la compañía durante la temporada 2025-2026, según reportó Reuters el 5 de septiembre de 2025.
La medida adoptada por Royal Caribbean responde a las advertencias del Departamento de Estado de Estados Unidos (EE.UU.), que mantiene activa una alerta máxima para viajes a Haití desde el 15 de julio de 2025. El aviso, recogido por Adept Travel y AP News, se debe al aumento de la criminalidad, los secuestros y la presencia de organizaciones catalogadas como terroristas por las autoridades estadounidenses.
La situación en Haití representa un escenario complejo para la región y para la industria del turismo. Bandas armadas han incrementado su presencia en Puerto Príncipe y alrededores, lo que generó el cierre de infraestructuras clave, entre ellas el aeropuerto internacional. Según Travel and Tour World y Royal Caribbean Blog, estos factores obligaron a la empresa de cruceros a modificar su operativa en el país caribeño.
La compañía Royal Caribbean anunció la suspensión de escalas en Labadee, situada en la costa norte de Haití, tras evaluar el deterioro de la seguridad en todo el país. La empresa declaró que “por precaución, se han pausado las próximas visitas a Labadee por lo menos hasta abril de 2026”, según citó Royal Caribbean Blog. Los motivos incluyen la intensificación de la violencia armada, el aumento de los secuestros y disturbios civiles que afectan la seguridad tanto de turistas como de trabajadores.
De acuerdo con AP News, la expansión de la actividad delictiva más allá de la capital ha incrementado los riesgos durante el tránsito hacia y desde los puertos y áreas turísticas, lo que ha llevado a la suspensión preventiva de rutas cuya seguridad no puede ser garantizada por las autoridades locales ni por la propia empresa.

La interrupción de operaciones en Labadee está prevista al menos hasta abril de 2026, según la comunicación oficial de la compañía reproducida por Royal Caribbean Blog. Esta suspensión afecta a más de 40 rutas de crucero y a todas las grandes embarcaciones de la flota que visitaban el destino, entre las que se encuentran Adventure of the Seas, Freedom of the Seas, Icon of the Seas, Oasis of the Seas y Radiance of the Seas. La reanudación dependerá de una mejora verificable en la seguridad general del país, según reiteró la empresa en declaraciones recogidas por Reuters.
La advertencia emitida por el Departamento de Estado de EE.UU. describe a Haití como un destino con riesgo extremo para turistas y viajeros de negocios. “No viajen a Haití debido a secuestros, delitos, terrorismo, disturbios civiles y servicios sanitarios insuficientes”, cita el aviso oficial difundido por Adept Travel. El gobierno estadounidense advierte que las organizaciones criminales locales han realizado secuestros de ciudadanos norteamericanos y que han exigido rescates desde decenas de miles hasta cientos de miles de dólares.
Adicionalmente, la advertencia detalla que la capacidad de las autoridades diplomáticas estadounidenses para brindar asistencia consular y atención de emergencia es reducida debido al control territorial de las bandas armadas. AP News informó que la embajada de EE.UU. en Haití solo opera con servicios limitados, y la evacuación de ciudadanos depende de recursos privados o vuelos comerciales que también han sido restringidos.
El cese de operaciones de Royal Caribbean en Labadee tiene consecuencias directas sobre la economía de la región. Las comunidades que viven del turismo verán una reducción significativa en sus ingresos, ya que cada arribo de un crucero suponía oportunidades para vendedores, trabajadores de servicios, transportistas y artesanos. Travel and Tour World calcula que los desembarques de estos cruceros inyectaban varias decenas de miles de dólares en la economía local por cada escala programada.
La estabilidad de cientos de empleos indirectos y directos ligados al turismo de cruceros queda comprometida mientras persista la suspensión. Autoridades locales y empresarios del sector han manifestado su preocupación institucional ante esta interrupción de las actividades, de acuerdo a datos recogidos por Reuters y Travel and Tour World.
Royal Caribbean notificó individualmente a los pasajeros afectados, quienes pueden optar por rutas alternativas, días adicionales en altamar o el cambio de escala a otros puertos del Caribe, entre ellos Nassau (Bahamas), Puerto Plata (República Dominicana) y George Town (Islas Caimán). Además, los clientes que hayan contratado excursiones específicas para Labadee reciben el reembolso total, según confirmó la naviera y reseñó Royal Caribbean Blog.
Las condiciones para el reemplazo o reprogramación de viajes se comunican caso por caso, y la compañía sigue actualizando sus itinerarios conforme a la evolución de la situación en Haití y las recomendaciones de las autoridades internacionales y locales.

Los viajeros recibirán información específica y opciones alternativas para sus vacaciones. La empresa estadounidense asegura que los ajustes a la programación se mantendrán mientras persistan las condiciones de riesgo, y recalca que la seguridad de pasajeros y tripulación es prioritaria, según reportó Reuters. Por su parte, los residentes y trabajadores de Labadee enfrentan un panorama incierto en términos de ingresos y empleo debido al freno total en el flujo de turistas.
La reactivación de las escalas dependerá de una evaluación de riesgo conjunta con organismos internacionales y autoridades haitianas. El sector turístico de Haití permanece a la espera de una posible normalización de la situación de seguridad en el futuro próximo.