
El Birkin original de Hermès, diseñado específicamente para la actriz y cantante Jane Birkin en 1984, será subastado por primera vez en 25 años. La pieza, considerada el prototipo del modelo más codiciado de la maison francesa, será ofrecida al mejor postor el próximo 10 de julio en Sotheby’s, después de una gira internacional que incluyó paradas en París, Hong Kong y Nueva York.
Este modelo nació de un encuentro casual entre Birkin y Jean-Louis Dumas, entonces director ejecutivo de Hermès: “Creo que lo dibujé en la bolsa para el mareo, o la bolsa para no vomitar. Y él dijo: ‘Te lo haré’”, recordó la artista en primera fila del desfile de Hermès en otoño de 2012.
La subasta del bolso ocurre menos de dos años después de la muerte de Jane Birkin, en julio de 2023, lo que aumentó su carga simbólica y sentimental dentro del mundo de la moda. Para coleccionistas y casas de subasta, se trata de una pieza histórica, cargada de huellas materiales y personales.
A diferencia de los modelos posteriores, este bolso presenta características únicas: está confeccionado en cuero negro, tiene las dimensiones de un Birkin 40 en altura y de un Birkin 35 en profundidad, incluye una correa cruzada y lleva grabadas las iniciales “J.B.” en la solapa delantera. El uso intensivo de Jane Birkin también dejó marcas visibles, incluyendo restos de calcomanías de Unicef y Médicos del Mundo, lo que, según Sotheby’s, subraya su carácter “profundamente personal”.

El bolso fue entregado a Birkin en 1985 y permaneció con ella casi una década. Luego, fue subastado por primera vez en 1994 en un evento benéfico a favor de Association Solidarité Sida, donde se vendió por 2.000 dólares. Su actual propietaria, la coleccionista francesa Catherine Benier, lo adquirió en otra subasta en el año 2000 por una suma no revelada y lo prestó para múltiples exposiciones, incluyendo el Victoria & Albert Museum en Londres.
La historia del Birkin comienza como una solución práctica. En un vuelo entre París y Londres, Jane Birkin se quejaba de que no existía un bolso lo suficientemente grande y funcional para su vida como madre. En ese entonces, usaba una canasta de mimbre portuguesa que había comprado en los años 60. El diseño de Dumas nació como respuesta a esa necesidad real.
Pero lo que surgió como un objeto utilitario pronto se transformó en un símbolo de lujo silencioso y codiciado. Jane no cuidó su bolso como una reliquia, lo habitó. Y eso es lo que vuelve a este Birkin tan especial: la mezcla entre la historia del diseño, la biografía de su dueña y el aura cultural que lo rodea.

El Birkin pronto se consolidó como un caso ejemplar de bien Veblen, categoría que designa a los productos cuyo valor se incrementa con el precio.
No basta con tener dinero. El sistema de acceso al Birkin es cerrado: para poder comprar uno, es necesario tener historial de compras en Hermès y que un vendedor autorice la venta. El acceso a un bolso suele implicar un proceso prolongado de compras frecuentes en tiendas Hermès, que puede extenderse durante meses o incluso años. Esta dinámica no oficial, conocida entre clientas habituales como el “jueguito de Hermès”, exige constancia y fidelidad antes de que la firma considere ofrecer uno de sus modelos más codiciados

Este sistema fue cuestionado judicialmente. En Estados Unidos, dos clientes presentaron una demanda contra Hermès en California por supuestas prácticas comerciales restrictivas. Aseguran que la firma condiciona la venta del Birkin a la compra de otros productos, lo cual, según los demandantes, podría violar leyes antimonopolio.
El valor de reventa de un Birkin puede superar ampliamente el precio de compra. Según datos de la plataforma BagHunter, el valor del Birkin aumentó un 500% en 35 años, superando el rendimiento de inversiones tradicionales como el oro o el índice S&P 500. Actualmente, modelos disponibles en Vestiaire Collective alcanzan hasta 100.000 euros.
Esto aplica tanto a modelos nuevos como vintage. En Sotheby’s, los modelos en excelente estado oscilan entre 5.000 y 50.000 dólares, dependiendo del tamaño y el color.

La cultura pop ha amplificado el prestigio del Birkin. En Sex and the city, el personaje de Samantha Jones descubre que hay una lista de espera de cinco años para obtener uno. “No es un bolso. ¡Es un Birkin!”, replica el vendedor en la escena. El episodio, emitido en 2001, marcó un punto clave en su historia como objeto aspiracional .
Desde entonces, celebridades como Victoria Beckham, Kylie Jenner y Kim Kardashian fueron fotografiadas luciendo diversos modelos. Jenner, en particular, ha mostrado ediciones raras como el Birkin So Black o versiones con estampado dálmata. Más recientemente, Dua Lipa lo ha convertido en parte de su estilo habitual, lo que demuestra su vigencia intergeneracional.

En el marco de las celebridades nacionales Wanda Nara posee en su vestidor de Milán una exclusiva colección de bolsos de lujo, entre los que se destaca el Himalaya Birkin de Hermès, confeccionado en cuero de cocodrilo niloticus con herrajes con diamantes, uno de los modelos más caros del mundo que puede ir desde los 10 mil dólares hasta los 300 mil.
También cuenta con varias versiones del clásico Birkin, todas reservadas para clientas selectas y valoradas por su capacidad de revalorización en el mercado de lujo.