
La policía de Santa Fe, Texas, investiga reportes de agujas de coser halladas en dulces repartidos durante el desfile de bienvenida escolar organizado por el Distrito Escolar Independiente de Santa Fe (ISD). Los incidentes se notificaron después del evento celebrado la noche del miércoles 16 de octubre. Las autoridades confirmaron que los dulces contaminados llegaron al menos a tres hogares en diferentes puntos del recorrido del desfile, según un comunicado publicado en redes sociales.
El primer reporte provino de Jeremy Partin, quien detalló que su familia cada año asiste a la parada y recibe bolsas de dulces lanzados desde las carrozas. Su hija, de 18 años, al revisar el contenido encontró un alfiler incrustado en una barra de Kit Kat, artefacto detectado dentro del empaque y visible a simple vista. Partin afirmó: “Esto no fue un accidente. Lo insertaron deliberadamente”.
La policía exhortó a los padres a revisar con detalle todos los dulces recibidos durante el desfile. Tras la publicación del aviso oficial, la Santa Fe Police Department (SFPD) informó que la situación es objeto de una investigación en curso, basada en evidencias físicas entregadas por las personas afectadas. El departamento confirmó que no existen reportes de lesiones hasta el momento y solicitó a la comunidad reportar cualquier hallazgo sospechoso.

El SFPD caracteriza el hecho como un acto criminal y mantiene abiertas varias líneas de investigación. Según un teniente de la corporación citado por ABC News, se indagan tres casos confirmados en los que se encontraron agujas en dulces recolectados a lo largo de diferentes segmentos de la ruta. Las autoridades explicaron que reciben llamadas adicionales por parte de la comunidad y piden a quienes participaron en el evento revisar con atención los dulces obtenidos y, en caso de hallazgos, comunicarse a la línea directa disponible.
El desfile fue autorizado formalmente por el Santa Fe ISD, y actualmente trabajan junto al distrito para identificar a las personas responsables de cada flotilla participante. La policía precisó que los padres que reportaron el incidente estaban dispersos a lo largo de la ruta, desde Centennial Oaks hasta zonas cercanas a Highway 6 y Warpath.
De acuerdo con el testimonio de Partin, los objetos metálicos estaban disimulados debajo del pliegue del envoltorio del chocolate, lo que sugiere intencionalidad. Al darse cuenta de la anomalía, la familia contactó inmediatamente a las autoridades, que en un primer momento consideraron que podía tratarse de un caso aislado. Sin embargo, en minutos, la policía reportó la existencia de otros incidentes similares en la zona.

Tras los reportes, varias voces de la comunidad en redes sociales solicitaron mayor claridad sobre las pruebas disponibles, pidiendo a las autoridades transparentar la información y solicitar evidencias fotográficas. En la publicación oficial del SFPD varias personas sugirieron alternativas para explicar la presencia de objetos punzantes, aunque la policía hasta ahora considera que los hechos están respaldados por pruebas materiales.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) emitió recomendaciones claras para evitar el consumo de productos no envueltos comercialmente y alienta a inspeccionar todos los empaques en busca de señales de alteración, tales como agujeros, decoloración, rasgaduras o cualquier objeto extraño. “Deseche cualquier elemento sospechoso”, advierte el comunicado.
Las autoridades recalcaron la importancia de actuar con precaución en vísperas de celebraciones como Halloween, época donde este tipo de leyendas urbanas suelen circular, aunque pocas veces logran ser corroboradas por la policía. Según análisis de casos anteriores citados en The Independent, menos del 25% de los reportes sobre objetos extraños en caramelos derivan en lesiones, y la gran mayoría no se evidencia como incidentes sistemáticos ni malintencionados.