
Dos hombres resultaron heridos, uno de ellos con lesiones que amenazan su vida, tras un tiroteo ocurrido la noche del sábado en el campus de la Norfolk State University (NSU), en Virginia, según confirmaron las autoridades locales a WTKR y ABC News. El incidente se registró alrededor de las 11:30 p.m. en el 2200 block de Presidential Parkway, en la sección conocida como Greek Row dentro del campus universitario. Ambos heridos fueron trasladados a un hospital cercano; uno de ellos se encuentra en estado grave.
De acuerdo con el portavoz de la universidad, Stan Donaldson, citado por la filial de ABC News, WVEC, tanto la policía universitaria como la policía de Norfolk respondieron rápidamente tras recibir los reportes de disparos. Hasta el momento, no se ha confirmado si los dos hombres heridos tienen vínculos con la universidad como estudiantes o empleados. La investigación sigue activa, y no se han divulgado detalles sobre posibles sospechosos o motivaciones.
Como medida preventiva, el campus de NSU fue cerrado temporalmente durante la madrugada del domingo mientras continuaban las diligencias policiales, informó también ABC News. Las autoridades locales han solicitado a cualquier persona con información que se comunique de forma anónima a través de la línea Norfolk Crime Line (1-888-LOCK-U-UP) o el sitio p3tips.com/1126.

Este tiroteo en Norfolk, aunque sin víctimas fatales al momento, se produce menos de una semana después de uno mucho más grave en la Universidad de Florida, donde dos personas murieron y seis más resultaron heridas. El ataque duró solo cinco minutos y fue cometido por Phoenix Ikner, un estudiante de 19 años que utilizó el arma de fuego de su madre, quien trabaja como agente de policía.
El caso de Ikner ha generado alarma en torno a la facilidad con la que estudiantes pueden acceder a armas dentro del entorno doméstico. En su caso, el joven tenía antecedentes de inestabilidad emocional y, según documentos judiciales citados por el medio, había manifestado conductas violentas previas al ataque. El arma utilizada era una pistola semiautomática registrada a nombre de su madre.
Aunque el incidente en Norfolk no ha sido atribuido aún a un estudiante, vuelve a poner en discusión las políticas de seguridad en las escuelas de educación básica y en las universidades. Según las autoridades locales en Virginia consultadas por ABC News, la prioridad ahora es esclarecer los hechos y garantizar la seguridad de la comunidad universitaria.

La policía de Norfolk mantiene una investigación activa para determinar qué provocó el tiroteo del sábado por la noche. Según declaraciones recogidas por WTKR, los agentes acudieron a la escena tras recibir múltiples llamadas al 911. A su llegada, encontraron a las dos víctimas con heridas de bala en una zona de tránsito habitual para estudiantes.
Hasta este domingo no se ha producido ninguna detención y tampoco se ha informado si hay cámaras de seguridad que hayan captado el suceso. El portavoz universitario, Stan Donaldson, aseguró que la universidad está colaborando con las autoridades para esclarecer los hechos y reforzar las medidas de seguridad internas. “No hay más información disponible en este momento”, declaró a WVEC, filial de ABC News.
Las autoridades han reiterado la necesidad de colaboración ciudadana. El canal WTKR recordó que cualquier persona que haya presenciado el tiroteo o tenga datos que puedan ayudar a la identificación del tirador puede aportar pistas de forma anónima al sistema p3tips.com o llamando a Crime Line. La universidad, por su parte, no ha suspendido las clases, pero se ha reforzado la presencia policial en los accesos al campus.