
Agentes federales de Estados Unidos pueden arrestar y deportar a los migrantes que participen en actos delictivos, a quienes representen una amenaza para la seguridad pública o a aquellos que violen su visa. Este proceso consiste en expulsar del país a los no ciudadanos que no cumplan con la ley de inmigración.
Los extranjeros pueden ser retenidos en un centro de detención antes de enfrentar un juicio o el proceso de deportación. Funcionarios explicaron en la página web de usa.gov que los migrantes pueden comparecer en un tribunal de inmigración durante su proceso de remoción, sin embargo, existen casos en los que pueden enfrentar una expulsión acelerada.
Un proceso apresurado puede ocurrir después de que un extranjero viaje a EEUU con documentos falsificados, no cumpla los requisitos de visa y otras condiciones más.

Si bien la mayoría de las deportaciones son realizadas por vía aérea, a cargo del gobierno de EEUU, otras pueden hacerse utilizando transporte terrestre y aéreo, según usa.gov.
Recientemente, funcionarios de la Embajada de Estados Unidos en México compartieron en redes sociales una publicación en la que aseguran que están arrestando a migrantes que hayan reingresado ilegalmente al país. Estas personas enfrentarán graves consecuencias legales.
“Reingresar a EEUU después de haber sido deportado tiene graves consecuencias legales, incluida la cárcel. De 10 a 20 años de prisión por reingreso ilegal tras haber sido deportado por un delito grave o con agravantes”, escribieron los miembros de la embajada en X (anteriormente Twitter).
En caso de ser inadmisible en el país, según las secciones 212 (a)(9)(A) o (C) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA), las personas deportadas pueden solicitar un permiso para volver a ingresar de manera legal a EEUU a través del Formulario I-212.
Dicho proceso, según información disponible en la página de internet del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS), sirve para solicitar consentimiento para volver a pedir la admisión a EEUU e ingresar de manera legal al país.
El Formulario I-212 se presenta ante los agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EEUU (CBP), sin embargo, también puede entregarse de manera electrónica a través del Entorno Electrónico de Formularios de Adjudicación Segura (e-SAFE).
En caso de estar en proceso de deportación, las autoridades recomiendan seguir las instrucciones especiales de presentación que le hayan sido proporcionadas por el tribunal de migración, así como leer detenidamente la información expresada en las páginas acerca del Formulario I-212.

En algunas ocasiones, y luego de que un juez decida que procede la deportación, las personas pueden salir del país por su cuenta antes de que los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EEUU (ICE) ejecute la orden de expulsión. Esta acción es conocida como salida voluntaria.
La salida voluntaria, según información oficial, es un permiso que se otorga para abandonar el país de forma que se enfrenten menos consecuencias negativas que ser deportado. Esta consiste en solicitar al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) salir del territorio estadounidense utilizando su propio dinero para el viaje a su nación de origen.
Es necesario comprender que no todos los migrantes que enfrentan una orden de deportación califican para solicitar la salida voluntaria y, aún así, existen consecuencias que pueden afectar su capacidad para reingresar a EEUU en el futuro.
En un documento proporcionado por los funcionarios de usa.gov, se explica que “casi siempre”, es mejor no solicitar la salida o deportación voluntaria, a menos que no tenga ninguna defensa contra la expulsión, como asilo, retención, cancelación de deportación o una petición familiar pendiente.