Fue detenida en el aeropuerto por una manzana que casi le cuesta 800 dólares de multa

Su accidente pudo costarle multas de hasta 800 dólares, según su relato. (REUTERS/Mike Segar/File Photo)

Una turista que regresaba de un viaje internacional estuvo a punto de enfrentar multas por hasta 800 dólares y la revocación de su Global Entry tras cometer un error que, en principio, pareciera inocente y podría pasarle a cualquiera.

Según relató la usuaria de TikTok Discovering with Dina, el incidente ocurrió mientras esperaba su equipaje en el área de reclamo del aeropuerto, cuando un oficial de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) se le acercó después de que un perro detector olfateara su equipaje.

En un video publicado en TikTok, Dina explicó que el oficial le preguntó si llevaba algún alimento, momento en el que recordó que tenía una manzana procedente de Ámsterdam, la cual no había declarado.

Las autoridades decidieron no multarla por ser su primera infracción. (REUTERS/Eduardo Munoz)

Según su relato, el oficial le advirtió que podría imponerle una multa de 500 dólares y revocar su Global Entry, un programa que facilita el ingreso rápido a Estados Unidos para viajeros preaprobados. Dina detalló que su pasaporte fue confiscado temporalmente y que su equipaje fue inspeccionado por las autoridades.

Dina compartió su experiencia como advertencia para otros viajeros, subrayando la importancia de declarar todos los alimentos, plantas y productos de origen animal al ingresar a EEUU.

En su publicación, señaló que incluso alimentos procesados deben ser declarados, algo que desconocía antes del incidente. “En caso de duda, declárelo para evitar multas y confiscaciones”, escribió. Afortunadamente, Dina solo recibió una advertencia, ya que era su primera infracción.

Mentir sobre esta manzana pudo haberle costado una multa de 300 dólares, además de “otra multa de 500 dólares por tener realmente la manzana y Global Entry”, según relató.

El caso de Dina no es aislado. En los comentarios de su video, otros usuarios compartieron experiencias similares. Una persona mencionó haber perdido su Global Entry y haber recibido una multa de 500 dólares por no declarar una ciruela, mientras que otra relató haber declarado incluso una lata de refresco por temor a sanciones.

Este último usuario afirmó que le “hicieron creer que me iban a condenar a la silla eléctrica”.

Estas anécdotas reflejan la estricta política de las autoridades estadounidenses respecto a la entrada de productos agrícolas al país.

De acuerdo con la CBP, muchos productos agrícolas están prohibidos porque pueden portar plagas de plantas o enfermedades animales extranjeras. La agencia enfatiza que todos estos artículos deben ser declarados y están sujetos a inspección por especialistas en los puntos de entrada. Entre los productos prohibidos se encuentran frutas frescas, plantas y ciertos alimentos procesados.

Otras personas aprovecharon la publicación de la creadora de contenido y externaron situaciones similares. (REUTERS/Megan Varner)

El tema de la seguridad agrícola ha cobrado relevancia en los últimos años. En un caso reciente, dos ciudadanos chinos, identificados como Yunqing Jian y Zunyong Liu, enfrentaron cargos federales por intentar ingresar un hongo clasificado como una posible arma de agroterrorismo, tal y como reportó CBS News.

Los acusados representaban “una amenaza inminente para la seguridad pública”, según revelaron autoridades de la Fiscalía de EEUU.

La experiencia de Dina pone de manifiesto la necesidad de que los viajeros estén informados sobre las normativas aduaneras. Además de alimentos, otros artículos que deben ser declarados incluyen compras superiores a 800 dólares, efectivo o cheques de viajero que superen los 10.000 dólares, y cualquier producto de origen animal o vegetal.

Aunque las formas de declaración en los aviones han sido eliminadas en algunos casos, las autoridades recuerdan que la responsabilidad de declarar recae en los viajeros.

Este tipo de incidentes no solo puede resultar en multas económicas, sino también en la pérdida de privilegios como el Global Entry, lo que puede complicar futuros viajes internacionales.