
WhatsApp ha lanzado una nueva advertencia dirigida a los usuarios que utilizan versiones no oficiales de su aplicación. Estas alternativas, que se presentan como mejoras con funciones adicionales, representan un riesgo significativo para la privacidad y podrían provocar la suspensión definitiva de la cuenta. La compañía, propiedad de Meta, recuerda que el uso de estas variantes infringe sus políticas de servicio y expone los datos personales a posibles ataques informáticos.
En los últimos meses, se ha detectado un aumento en la descarga de versiones alteradas como GB WhatsApp, WhatsApp Plus o FM WhatsApp. Aunque prometen más opciones de personalización o envío de archivos más grandes, carecen de las medidas de seguridad que garantizan las versiones legítimas disponibles en Google Play y App Store. Esto las convierte en un canal potencial de robo de información o instalación de software malicioso.
Meta subraya que estas aplicaciones no cuentan con cifrado de extremo a extremo, lo que deja los mensajes, fotos y contactos vulnerables a espionaje o filtraciones. Además, advierte que los usuarios que insistan en utilizar versiones no verificadas pueden perder el acceso a su cuenta de manera definitiva.

Entre las aplicaciones que más preocupan a los especialistas se encuentran GB WhatsApp, Yo WhatsApp, FM WhatsApp y WhatsApp Plus. Todas ofrecen características llamativas que no existen en la aplicación oficial: cambiar colores del chat, ver estados eliminados o enviar videos de gran tamaño. Sin embargo, ninguna de ellas pasa por los controles de seguridad de las tiendas oficiales.
Estas apps modificadas suelen obtenerse desde sitios web desconocidos o foros, lo que aumenta el riesgo de descargar versiones adulteradas con código malicioso. Según expertos en ciberseguridad, muchas de ellas incorporan funciones ocultas que permiten activar micrófonos, acceder a archivos del teléfono o robar información personal.
El sistema de seguridad de WhatsApp cuenta con mecanismos que identifican patrones de conexión anómalos y firmas digitales alteradas. Cuando se detecta el uso de una versión no compatible, la plataforma emite una advertencia al usuario y suspende temporalmente su cuenta, mostrando el mensaje: “Tu cuenta ha sido suspendida temporalmente. Estás usando una versión no compatible de WhatsApp.”

Durante este periodo, que suele durar 72 horas, se invita al usuario a descargar la versión oficial desde las tiendas autorizadas. Si se reincide en el uso de una app no aprobada, la cuenta puede ser eliminada de forma permanente. Este proceso busca proteger tanto al usuario como al ecosistema de mensajería de posibles ataques externos.
De acuerdo con un reciente informe de Kaspersky, varias versiones de GB WhatsApp han sido utilizadas para distribuir software espía capaz de grabar conversaciones, activar el micrófono y sustraer archivos personales. El análisis registró más de 340.000 intentos de ataque en los que estas aplicaciones modificadas se utilizaron como medio de infección.
El estudio advierte que, además de la pérdida de datos, los usuarios corren el riesgo de que sus cuentas sean clonadas o utilizadas para difundir estafas. La falta de supervisión y la ausencia de actualizaciones oficiales hacen imposible garantizar la privacidad de la información.

Si la aplicación muestra un aviso de suspensión temporal, la recomendación es desinstalar de inmediato la versión no oficial y descargar la app original desde Google Play Store o App Store. Una vez reinstalada, es necesario verificar la cuenta con el número telefónico habitual para restablecer el servicio.
WhatsApp también aconseja activar la verificación en dos pasos, mantener el sistema operativo actualizado y evitar la instalación de software desde fuentes desconocidas. De esta manera, se reduce el riesgo de sufrir ataques o pérdida de información.
Con esta medida, WhatsApp busca frenar la proliferación de versiones modificadas que prometen funciones exclusivas pero comprometen la seguridad del usuario. La empresa insiste en que solo la versión oficial garantiza la protección de los mensajes mediante cifrado de extremo a extremo y el cumplimiento de sus políticas de privacidad.
La advertencia llega en un momento en que el fraude digital y el robo de datos personales continúan en aumento. En un entorno cada vez más conectado, mantener la aplicación original y evitar atajos puede ser la diferencia entre una experiencia segura y una cuenta comprometida.