
En febrero de 2025, aproximadamente 200 residentes de un complejo de apartamentos en el noreste de Filadelfia se vieron sorprendidos al recibir una carta del Departamento de Transporte de Pensilvania (PennDOT), informándoles que sus licencias de conducir y otras identificaciones oficiales habían sido canceladas de manera abrupta.
Esta misiva generó alarma y confusión entre los afectados, muchos de los cuales son inmigrantes provenientes de la ex Unión Soviética, Ucrania y Georgia.
La carta enviada por el PennDOT indicaba que, si los residentes no devolvían inmediatamente sus licencias y otros documentos oficiales, las autoridades policiales del estado podrían intervenir.
El texto mencionaba específicamente que, tras recibir pruebas de que los destinatarios no estaban autorizados para poseer una licencia de conducir, el PennDOT procedería a cancelar cualquier documento de identificación, como licencias de conducir y permisos de aprendizaje, conforme a lo estipulado en la sección 1572 del Código de Vehículos de Pensilvania.

Sin embargo, el susto y la incertidumbre generada por esta comunicación resultaron ser el producto de un error administrativo en los registros de residencia de los solicitantes. El complejo de apartamentos Rhawnhurst, donde vivían los afectados, comparte la misma dirección con una instalación de U-Haul en el 7750 Roosevelt Boulevard.
Esta confusión de zonificación, que había pasado desapercibida durante años, condujo al PennDOT a confundir la dirección residencial con la de una propiedad comercial, lo que originó la cancelación masiva de licencias.
El error comenzó cuando el PennDOT, como parte de sus auditorías rutinarias de direcciones, identificó una gran cantidad de solicitudes de licencia que coincidían con la misma dirección, la cual el departamento había clasificado erróneamente como comercial. Esta discrepancia resultó en el envío de las cartas de cancelación a los residentes del complejo de apartamentos.
El problema se originó en una confusión entre dos propiedades que comparten la misma dirección en los registros de zonificación: el complejo de apartamentos Rhawnhurst y la instalación de U-Haul.
Aunque la dirección correcta para el complejo residencial es 2450 Hartel Avenue, las cartas fueron enviadas con la dirección equivocada del 7750 Roosevelt Boulevard, que pertenece al negocio de U-Haul.

Marina Sklyarsky, gerente del complejo de apartamentos Rhawnhurst, explicó que la confusión generada por la notificación fue considerable. Muchos residentes no pudieron entender completamente la carta debido a la terminología legal utilizada, especialmente aquellos que no dominan el inglés.
La comunidad afectada está mayoritariamente compuesta por inmigrantes que hablan ruso y ucraniano como su lengua principal, por lo que la carta escrita en inglés y con jerga legal se convirtió en un obstáculo adicional para comprender la situación.
“Fue muy perturbador”, dijo Sklyarsky en entrevista con The Philadelphia Inquirer, describiendo el impacto emocional de la situación. “Las personas estaban asustadas, confundidas, no sabían qué hacer. Algunos no pudieron trabajar, lo que retrasó incluso el pago de sus rentas. Estaban totalmente aterrados”.
Este miedo se extendió rápidamente por todo el complejo de apartamentos, ya que muchos de los residentes trabajaban como conductores de servicios de transporte compartido (rideshare) y camioneros, profesiones que requieren una licencia de conducir válida.
El impacto económico de la cancelación fue significativo, ya que los residentes temían perder sus empleos o ser multados. Además, algunos de ellos ya habían pagado tarifas adicionales para obtener nuevas licencias y documentos. Sin embargo, el error administrativo no solo afectó a los que ya habían pagado, sino también a aquellos que habían entregado sus licencias o permisos por temor a que su licencia estuviera suspendida.

El problema fue resuelto cuando Marina Sklyarsky y algunos residentes acudieron a la oficina del representante estatal Sean Dougherty en busca de ayuda. Inicialmente, el personal de la oficina de Dougherty pensó que la carta era una estafa, pero tras contactar directamente con PennDOT, se descubrió que el error era legítimo.
Dougherty, quien representa el distrito en el que se encuentra el complejo de apartamentos Rhawnhurst, intervino en nombre de los residentes y explicó el problema de la dirección compartida. A través de su oficina, se logró que PennDOT corrigiera el error.
Una vez verificado el problema, PennDOT eliminó las cancelaciones y notificó a los residentes que podían seguir utilizando sus licencias e identificaciones antiguas sin ningún inconveniente.
Viktor Kagan, jefe de personal de Dougherty, destacó que, aunque PennDOT corrigió la situación, el proceso tardó casi un mes, durante el cual muchos residentes ya habían devuelto sus documentos o pagado por nuevos permisos.
A pesar de que PennDOT exoneró a los afectados de las tarifas por los reemplazos de licencias, algunos residentes siguen enfrentando dificultades. En algunos casos, aquellos que pagaron por nuevas licencias ya han recibido un reembolso, aunque no está claro si todos los afectados han recibido una solución completa.