
El proyecto de crear un dron europeo a través de la colaboración de varios países da un nuevo paso importante. La Organización Conjunta de Cooperación en Materia de Armamento (Occar) ha anunciado que se ha cerrado la Revisión Crítica de Diseño (CDR). Con esto, el diseño final de la aeronave estaría completado y estaría más cerca de iniciar sus vuelos.
España, Italia y Alemania están implicados en el desarrollo del ‘Eurodrone’, junto a Francia, que, desde hace meses, ha mostrado sus dudas sobre su avance. De momento, el Ejecutivo ahora liderado por Sebastien Lecornu, que ha seguido de cerca el proyecto como ministro de Defensa, mantiene esta inversión entre sus presupuestos.
La iniciativa reúne a Airbus Defence and Space (Alemania y España), Leonardo (Italia) y Dassault Aviation (Francia), bajo la gestión de Occar en representación de los cuatro países. De esta forma, tres de las grandes compañías del mercado de defensa están colaborando, lo que tiene enormes ventajas pero genera los conflictos por el control que asume cada parte.
La consolidación del diseño del sistema marca un avance clave, al permitir la fabricación del prototipo y el inicio de pruebas en tierra previas al primer vuelo. Se trata del primer dron de estas capacidades completamente europeo, lo que ha cobrado una enorme relevancia tras el objetivo marcado por la Comisión Europea de fomentar la industria del continente para favorecer la independencia.
Los responsables del RPAS MALE señalan que, tras la conclusión de la fase de diseño, el proyecto pasará a estos próximos pasos que son fundamentales en un proyecto de aviación. Estas etapas precederán el primer vuelo y las actividades de calificación, que determinarán la efectividad y calidad de un ambicioso programa.
Este cierre de arquitectura y diseño técnico respeta el calendario establecido, que fijaba el objetivo antes de finalizar el año. Según la organización, a principios de 2027 el avión no tripulado debería iniciarse su puesta en el aire, de manera que en poco más de dos años, si aprueba con nota todas las pruebas, podría estar en uso.
En 2024, surgieron dudas en torno a la participación de Francia en el programa ‘Eurodrone’. El entonces ministro de las Fuerzas Armadas, Lecornu, planteó en el Parlamento la posibilidad de reconsiderar la implicación francesa a raíz del retraso y de la necesidad de evaluar si el sistema cumplirá con los requisitos operativos previstos cuando entre en servicio.
Pese al debate, el Ministerio confirmó en su planificación anual la intención de mantener la adquisición de seis sistemas. El Eurodrone está diseñado para operar más de cuarenta horas, alcanzar 45.000 pies y transportar hasta 2,3 toneladas de carga útil. Francia sigue encontrando una herramienta potencialmente importante y le permite incluirlo dentro de la inversión en industria de defensa europea que pide el bloque comunitario.
El programa ha superado la revisión crítica de diseño, habilitando la próxima fase de construcción de prototipos y pruebas en tierra. No obstante, la Fuerza Aérea francesa considera alternativas más ligeras y económicas y, aunque de momento siguen participando, habrá que seguir de cerca su implicación. Hace meses, Lecornu ya amenazó con “sanciones” por retrasos en los avances.