
En un evento que marcó un hito en la exploración espacial, Katy Perry cumplió su promesa de cantar en el espacio durante un vuelo organizado por Blue Origin. La cantante despegó a bordo de la nave New Shepard NS-31 el lunes, acompañada por un grupo exclusivamente femenino que incluyó a Lauren Sánchez, prometida de Jeff Bezos; la presentadora de televisión Gayle King; la ex científica espacial de la NASA Aisha Bowe; la científica que estudió planetas alrededor de otras estrellas y que ahora aboga por los sobrevivientes de violencia sexual Amanda Nguyen; y la productora de cine Kerianne Flynn.
Este vuelo, que tuvo una duración total de poco más de diez minutos, representó la primera misión espacial integrada únicamente por mujeres en más de seis décadas.
El vuelo no solo fue un logro técnico, sino también una experiencia profundamente emocional para las participantes. Como se puede observar en algunas imágenes del regreso de la nave a la tierra, tanto Perry como King besaron el suelo al regresar al planeta, mientras que Sánchez describió la experiencia como indescriptible.

El despegue tuvo lugar a las 8:30 horas (tiempo local), desde el oeste de Texas. Durante el trayecto, la nave alcanzó el espacio por aproximadamente cuatro minutos antes de regresar a la Tierra. En este breve pero significativo tiempo, Perry interpretó una versión de “What a Wonderful World”, el clásico de Louis Armstrong, cumpliendo así la promesa de cantar en el espacio que hizo en una publicación de Instagram la noche del domingo.
“La Tierra se veía tan tranquila”, afirmó, añadiendo que incluso pudieron observar la luna desde la nave, de acuerdo con declaraciones recogidas por The Independent.
Por su parte, Perry destacó el impacto personal del viaje, calificándolo como “la máxima expresión y una entrega a lo desconocido”. Además, alentó a otros a vivir esta experiencia.
El propósito de la misión, según explicó Sánchez, era inspirar a las personas a “soñar en grande”. También elogió a las mujeres que formaron parte del vuelo, describiéndolas como “narradoras de historias increíbles”. Este vuelo fue el undécimo del programa de vuelos tripulados de Blue Origin, que desde 2021 ha llevado a diversos pasajeros al espacio.
Para Perry, el viaje tuvo un significado especial que trascendió lo profesional. Según publicó el medio, la cantante compartió en sus redes sociales que había recibido “confirmaciones” de que este evento estaba destinado a suceder. En un video publicado en Instagram, Perry explicó que al ser invitada al vuelo, notó que la cápsula tenía un contorno en forma de pluma, un símbolo que su madre siempre había asociado con ella. Además, la cápsula llevaba el nombre de “Tortuga”, otro de los apodos que su madre le había dado.

“No hay coincidencias, y estoy muy agradecida por estas confirmaciones y de sentir que algo más grande que yo está al mando”, expresó Perry.
La cantante también relató detalles del entrenamiento previo al vuelo, que incluyó simulaciones dentro de una cápsula, pruebas de ruido y preparación para las condiciones que enfrentarían en el espacio, según reportó The Independent.
El vuelo NS-31 de Blue Origin no solo fue un evento significativo para las participantes, sino también un momento histórico en la exploración espacial. Esta fue la primera misión espacial exclusivamente femenina desde hace más de sesenta años.
Con este vuelo, Blue Origin continúa consolidándose como un actor clave en el turismo espacial, ofreciendo experiencias únicas que combinan la tecnología de punta con momentos profundamente humanos. Para Perry y sus compañeras de viaje, este evento no solo marcó un logro personal, sino también un mensaje de empoderamiento y valentía que resonará más allá de las fronteras de la Tierra.