La representante argentina en Miss Universo 2025, Aldana Masset, sorprendió al mundo al sincerarse en sus redes sociales sobre un aspecto de su vida que durante años mantuvo en la intimidad. La modelo, asesora de moda y cantante, nacida en Valle María, Entre Ríos, publicó un video en su cuenta de TikTok en el que relató abiertamente que tiene alopecia.
“Tengo alopecia. Nací con esta condición, en esta zona no me crece el pelo y no me va a crecer nunca. Durante mucho tiempo fue una gran inseguridad, por eso nunca lo hice público, pero hoy es algo que a mí me hace sentir fuerte porque puedo mostrar que todos tenemos imperfecciones. Hoy es algo que me da seguridad”, compartió con sus seguidores, mientras se preparaba para la etapa final del certamen en Tailandia.
La alopecia se caracteriza por la caída anormal del cabello. De acuerdo con el sitio de la Universidad de Rochester, “es una afección muy común que los dermatólogos ven a diario”.
Según la Clínica Universidad de Navarra, puede afectar el cuero cabelludo y otras zonas donde normalmente hay vello, como cejas, pestañas, barba o axilas. Puede limitarse a zonas pequeñas o abarcar la pérdida total de cabello, tanto en la cabeza como en el resto del cuerpo.
La alopecia es una condición caracterizada por la caída anormal del cabello y puede afectar tanto a hombres como a mujeres (Imagen Ilustrativa Infobae)Según la Clínica Universidad Navarra, la alopecia se clasifica en dos grandes grupos según la causa y la posibilidad de reversibilidad:
- Alopecias cicatriciales: provocan destrucción irreversible del folículo piloso y la pérdida permanente de cabello.
- Alopecias no cicatriciales: la caída del cabello suele ser reversible y no destruye el folículo.
Entre las formas más habituales destaca la alopecia androgénica (calvicie común), que afecta principalmente a los hombres, aunque también puede presentarse en mujeres. Asimismo, la alopecia areata ocurre cuando el sistema inmunológico ataca los folículos pilosos y puede originarse por mecanismos autoinmunes o estrés.
Los síntomas varían según el tipo de alopecia y el paciente, pero habitualmente incluyen:
- Pérdida gradual o rápida de cabello en la zona superior de la cabeza.
- Aparición de calvas circulares o irregulares, generalmente lisas y pálidas.
- Disminución progresiva de la densidad capilar.
- Caída total del cabello en determinadas zonas, e incluso en todo el cuerpo.
De manera ocasional, pueden observarse síntomas adicionales como picor o sensación de ardor local, así como alteraciones en las uñas, particularmente en la alopecia areata. En la mayoría de los casos, la principal manifestación es la caída del cabello, que puede ser súbita o paulatina.
En el caso de mujeres jóvenes como Masset, suelen verse zonas con menor densidad en la parte superior o cerca de la línea de nacimiento, lo que frecuentemente repercute en la autoestima, sobre todo en contextos como los certámenes de belleza.
Según informó la Clínica Mayo, la alopecia puede deberse a múltiples factores:
- Genéticos: la modalidad más frecuente, la androgénica, obedece a una predisposición hereditaria poligénica.
- Hormonales: las hormonas masculinas (andrógenos) afectan la fase de crecimiento del folículo piloso.
- Procesos autoinmunes: en la alopecia areata, el sistema inmunitario ataca y destruye los folículos capilares.
- Estrés y eventos vitales: situaciones de estrés, enfermedades, embarazos o traumatismos pueden desencadenar la caída del cabello.
- Deficiencias nutricionales: insuficiencia de hierro, aminoácidos, vitaminas o minerales.
- Tratamientos médicos agresivos: algunos medicamentos, quimioterapia y radioterapia pueden generar pérdida de cabello temporal o permanente.
- Factores físicos o cosméticos: peinados muy tensos, tinturas o tratamientos capilares pueden dañar el folículo piloso.
La detección temprana y la consulta con especialistas aumentan las posibilidades de un tratamiento adecuado (AdobeStock)El riesgo es mayor con la edad y entre los hombres, aunque puede afectar a mujeres y niños. Existe una tendencia aumentada en quienes tienen antecedentes familiares de esta condición.
Según los especialistas, la evaluación comienza con una revisión clínica de la historia personal y familiar, examen físico de las zonas afectadas y análisis de antecedentes. Los dermatólogos pueden solicitar exámenes de sangre para descartar enfermedades autoinmunes, trastornos tiroideos o carencias nutricionales y, en casos específicos, recurrir a la biopsia del cuero cabelludo para su análisis.
Un diagnóstico preciso permite elegir el tratamiento más adecuado, ya que cada tipo de alopecia responde a causas y abordajes diferentes. La falta de consulta médica o la autoevaluación llegan a ocasionar complicaciones o la pérdida irreversible de folículos.
El enfoque terapéutico depende de la causa, el tipo y la extensión de la enfermedad. Las formas no cicatriciales suelen ofrecer mejores resultados con las opciones disponibles.
Existen distintos tratamientos para la alopecia, desde medicamentos tópicos y orales hasta técnicas quirúrgicas avanzadas (@aldumasset)Ante causas autoinmunes, como la alopecia areata, los tratamientos incluyen corticoides tópicos o sistémicos y, en casos severos, inmunomoduladores como los inhibidores de JAK. La reposición nutricional es útil cuando la alopecia se origina en carencias específicas, mediante suplementos de vitaminas, aminoácidos azufrados y minerales.
Si la pérdida es extensa o persistente, existen pelucas y métodos de cobertura, así como nuevas técnicas quirúrgicas, como el trasplante capilar y la cirugía de Mohs, que brindan soluciones avanzadas en situaciones seleccionadas.
La consulta con especialistas permite adaptar el tratamiento a cada caso y mejorar la calidad de vida del paciente. El testimonio público de referentes como Aldana Masset contribuye a visibilizar la diversidad y abordar el sufrimiento emocional vinculado a la alopecia, trastorno que hasta ahora había permanecido, en gran parte, fuera del foco en la conversación pública.
hace 3 horas
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