La calma de un mes en Wall Street se hizo añicos, y las acciones estadounidenses se desplomaron después de que el presidente Donald Trump amenazara con aumentar los aranceles a China. El S&P 500 se desplomó un 2,7% el viernes, en su peor día desde abril. El Promedio Industrial Dow Jones cayó un 1,9% y el Nasdaq Composite perdió un 3,6%. Las acciones se encaminaban a una ligera subida por la mañana, hasta que Trump anunció que está considerando un aumento masivo de los aranceles a las importaciones chinas. Está molesto por las restricciones que China ha impuesto a las exportaciones de sus tierras raras. Las acciones podrían haber estado a punto de caer tras alcanzar récords recientemente en un repunte casi implacable.

Las principales acciones europeas registraron una fuerte caída este viernes, revirtiendo las ganancias acumuladas en la semana debido a la reaparición de temores de guerra comercial tras las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y la creciente preocupación ante la situación política en Francia. El índice paneuropeo STOXX 600 descendió un 1,2%, marcando su mayor retroceso intradía en más de un mes y dejando fuera de balance a los inversores, quienes siguieron de cerca los acontecimientos en la región.
El sector automotor encabezó los descensos semanales con un desplome superior al 9%, siendo golpeado especialmente por las fuertes pérdidas en compañías como Ferrari y BMW. En contraste, las empresas de servicios públicos, consideradas habitualmente como sustitutos de los bonos, fueron las que más subieron durante la semana en el mercado europeo.
Por otra parte, los inversores dirigieron su atención a Francia, donde el presidente Emmanuel Macron continúa la búsqueda de un nuevo primer ministro bajo una autoimpuesta fecha límite, mientras el Banco Central advertía que el bloqueo político empieza a impactar en el crecimiento económico. Las acciones francesas, representadas por el índice FCHI, terminaron la semana con una caída del 2%. El mercado se vio particularmente afectado el lunes, cuando Sebastien Lecornu, el quinto primer ministro francés en dos años, dimitió junto a su Gobierno pocas horas después de anunciar la formación del gabinete.
Durante la semana, el STOXX 600 había registrado máximos históricos alentado por perspectivas de una política monetaria más laxa en Estados Unidos y el optimismo sostenido impulsado por desarrollos en inteligencia artificial. No obstante, estas ganancias no lograron sostenerse ante el nerviosismo generado por la tensión política en Francia y Japón, además del riesgo de cierre del Gobierno estadounidense, factores que motivaron a los inversores a refugiarse en valores considerados seguros.
(Con información de Reuters)