
En un contexto de creciente presión sobre las políticas migratorias en Estados Unidos, varias universidades de Florida han decidido sumarse a la campaña estatal que busca reforzar la colaboración con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). Según informó CNN, estas instituciones han firmado acuerdos que permiten a las fuerzas del orden locales asumir funciones de agentes de inmigración, en línea con las políticas impulsadas por el gobierno de Donald Trump.
De acuerdo con un portavoz de la Universidad de Florida, la institución confirmó el viernes que ha firmado el acuerdo conocido como 287(g). Este convenio, según lo detalla el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), otorga a los agentes locales la autoridad para llevar a cabo tareas específicas relacionadas con la aplicación de leyes migratorias, siempre bajo la supervisión de ICE.
La decisión de las universidades de Florida se produce en un momento en el que las políticas migratorias han puesto en el punto de mira a estudiantes, profesores e investigadores internacionales en Estados Unidos. Según datos recopilados por CNN, en lo que va del año se han revocado más de 500 visas de estudiantes y académicos en todo el país. Estas revocaciones, en muchos casos, han estado relacionadas con delitos menores cometidos años atrás.

WFTV, una televisora local, confirmó que la Universidad de Florida Central y la Universidad de Florida del Sur también firmaron acuerdos con el ICE.
En el caso específico de la Universidad de Florida, el director de Asuntos Públicos de la institución confirmó al medio el viernes que cuatro estudiantes han perdido sus visas recientemente.
Además, la cancelación de visas no solo afecta a quienes enfrentan acusaciones graves, sino también a aquellos que han cometido infracciones menores.
El miércoles, un grupo de manifestantes se reunió en las inmediaciones de la Universidad de Florida para protestar por la deportación de un estudiante de Colombia. La televisora local WCJB reportó que Felipe Zapata Velásquez, de 27 años, fue deportado por los agentes del ICE el domingo pasado.
Jonathan Barrows, uno de los manifestantes, expresó que alguien fuera deportado por “algo tan simple como una multa por tener la licencia vencida”, era “una extralimitación” del gobierno.
“Espero que si contraatacamos ahora, podamos tener la oportunidad de un futuro mejor donde no tengamos que preocuparnos por cosas como esta”, añadió Barrow.
De acuerdo con el medio local, Zapata fue arrestado por primera vez por los agentes del Departamento de Policía de Gainesville a finales de marzo, ya que conducía con una licencia suspendida. Tras la detención, el estudiante fue trasladado a la cárcel del condado de Alachua.

Funcionarios de migración aseguraron que el estudiante ingresó a EEUU en 2023 utilizando una visa F-1 para asistir a Santa Fe College, esta misma fue cancelada el 4 de octubre de 2024, luego de que no se matriculara.
La madre de Zapata declaró a la prensa colombiana que su hijo intentó actualizar la información de su visa después de matricularse en la Universidad de Florida.
Oficiales del ICE llevaron a Zapata desde Gainesville al Centro de Procesamiento de Servicios Krome, ubicado en Miami, justo antes de deportarlo a su país de origen.
Ron DeSantis, gobernador del estado de Florida, explicó que los arrestos que fueron realizados a lo largo de la semana “eran correctos”. “Las leyes que firmo al respecto son constitucionales. No estamos aflojando el acelerador en lo más mínimo en lo que respecta a la aplicación de las leyes federales de inmigración”, añadió.