
Según han divulgado especialistas de Harvard Health, el Ashtanga Yoga es “una forma más vigorosa que ofrece mayores beneficios aeróbicos. Consiste en adoptar una serie de posturas llamadas saludos al sol, una tras otra, con movimientos rápidos y fluidos. Ashtanga requiere fuerza y resistencia, lo que lo hace ideal para los fanáticos del yoga experimentados”.
Una de las referentes globales de esta disciplina es la profesora brasileña Dany Sá, quien arribará a Buenos Aires en las próximas semanas para brindar clases intensivas.
Sá es profesora autorizada nivel 2 por el Sharath Yoga Center. Comenzó a estudiar la filosofía del yoga en 2002. Se graduó como bailarina en 1998 en la Facultad de Danza de UniverCidade, en Río de Janeiro. En 2005 y 2008 completó su formación como profesora con Pedro Kupfer en Florianópolis, en dos módulos.

Inició su práctica regular de Ashtanga Yoga en 2006 en Río de Janeiro con el profesor Matthew Vollmer. Continuó sus estudios en San Francisco, California, con Clayton Horton, donde también trabajó como su asistente en clases de Ashtanga.
Posteriormente, se perfeccionó en el Sharath Yoga Center (antes llamado Ashtanga Yoga Institute, KPJYAI) en Mysore, India, con los maestros Sharath Jois y Sarawasthi Jois. Allí también tomó clases de Cantos Védicos, Sánscrito, Bhagavad Gita y Yoga Sutras con el profesor Lakshmish.
En noviembre de 2013, fue asistente en las clases de su maestra Sharath Jois y recibió la autorización nivel 2 para enseñar el método. Desde entonces, enseña en su escuela Ashtanga Yoga Rio, ubicada en Río de Janeiro, y en talleres presenciales en distintas ciudades de Brasil y otros países. Desde 2020 también ofrece clases en modalidad virtual.

Sá considera que la práctica del yoga es una vía hacia el autoconocimiento. En su enfoque, esta práctica permite transformarse en una mejor persona a partir del compromiso y de la dedicación cotidiana.
Entre el 22 y el 24 de agosto de 2025, Dany Sá visitará Buenos Aires para ofrecer un seminario intensivo en Ashtanga Yoga Palermo, ubicado en Malabia 1346. La propuesta incluye tres prácticas Mysore, junto con dos talleres específicos: uno de arcos (Backbends) y otro de parada de manos (Handstands).
La inscripción se realiza a través del sitio web oficial o mediante correo electrónico a workshop@ashtangayogapalermo.com.ar. También hay información disponible en el perfil de Instagram. Los cupos son limitados y la participación requiere inscripción previa.
En MedlinePlus, el sitio de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, han planteado que el Ashtanga Yoga “ofrece un entrenamiento más exigente. En estas clases, se pasa rápidamente de una postura a otra”.
Además, tal como ha informado la Organización Mundial de la Salud (OMS), “el yoga es una herramienta poderosa para que las personas, las comunidades y los países mejoren no solo su salud física sino también su salud mental, y para prevenir y controlar las enfermedades no transmisibles (ENT)”.
“El yoga ha demostrado tener beneficios psicológicos inmediatos, ya que reduce la ansiedad y el estrés, y aumenta la sensación de bienestar emocional y social. A diferencia de otras formas de actividad física, que pueden ser agotadoras, puede ayudar a disminuir la frecuencia cardíaca y activar el sistema nervioso parasimpático. Incluso puede ser practicado por personas enfermas. Durante la respuesta a la COVID-19, ha ayudado a cientos de millones de personas de todos los países y culturas a mantenerse sanas y saludables, en consonancia con la convicción —expresada en la constitución de la OMS— de que la salud no es simplemente la ausencia de afecciones o enfermedades, sino un estado de completo bienestar físico, mental y social", repasaron desde la OMS.