
Starbucks, la reconocida cadena internacional de cafeterías, ha anunciado un cambio significativo en el código de vestimenta de sus empleados. A partir del 12 de mayo, los baristas deberán usar camisetas negras lisas y pantalones vaqueros en tonos caqui, negro o azul como parte de su uniforme, según informó The Associated Press (AP). Esta medida busca destacar los icónicos delantales verdes de la marca y reforzar una imagen más familiar para los clientes.
La empresa explicó que esta actualización tiene como objetivo mejorar la experiencia en sus tiendas, promoviendo un ambiente más cálido y acogedor. En un comunicado publicado en su sitio web y citado por AP, Starbucks señaló que la nueva política también simplificará las directrices para los empleados, permitiéndoles concentrarse en su labor principal: preparar bebidas de calidad y fortalecer la conexión con los clientes. Como parte de esta transición, la compañía proporcionará dos camisetas gratuitas a cada trabajador.
Sin embargo, esta decisión no ha sido bien recibida por todos. Starbucks Workers United, un grupo sindical que representa a empleados de más de 550 de las 10.000 tiendas propiedad de la empresa en Estados Unidos, expresó su descontento con la medida.

Según el sindicato, ya se había alcanzado un acuerdo preliminar sobre el código de vestimenta durante las negociaciones con la compañía, por lo que consideran que cualquier cambio debería esperar hasta que se concluya el proceso de negociación y se firme un acuerdo laboral definitivo.
Jasmine Leli, barista y delegada sindical en las negociaciones, criticó la decisión de la empresa y señaló que Starbucks debería priorizar aspectos que realmente impacten en el funcionamiento de las tiendas. Entre las preocupaciones mencionadas, destacó la necesidad de garantizar una dotación adecuada de personal y asegurar un número fijo de horas para los trabajadores. Estas demandas reflejan un enfoque en mejorar las condiciones laborales y operativas, más allá de las cuestiones estéticas.
El ajuste en el código de vestimenta se enmarca en un esfuerzo más amplio de Starbucks por redefinir la experiencia en sus establecimientos. La compañía busca recuperar la percepción de sus tiendas como espacios acogedores y consistentes, en un contexto en el que la competencia en el sector de las cafeterías sigue creciendo.
“En lugar de abordar los problemas más urgentes que los baristas llevan años planteando, Starbucks prioriza un código de vestimenta restrictivo que no mejorará las operaciones de la empresa”, dijo Leli en un comunicado citado por AP.

Además, señaló que la empresa está “obligando a los baristas a pagar” por ropa nueva cuando están “en apuros” por temas como los salarios y las horas sin garantizar.
Esta medida, según reportó la agencia de noticias, llega años después de que, en 2016, la empresa reformara su código de vestimenta para ser más flexible con los empleados y otorgarles una mayor capacidad de expresión personal añadiendo colores a las camisas que los empleados podían usar, estos incluían el gris, azul marino, mezclilla oscura y marrón, además de prendas estampadas.
Tres años después, en 2019, Starbucks volvió a modificar su código de vestimenta al permitir un piercing facial, siempre y cuando este no fuera más grande que una moneda de diez centavos. AP informó que este nuevo reglamento aún permite utilizar la joyería facial, siempre y cuando cumpla los requisitos establecidos.