
Un trágico incidente sacudió el vecindario de Beverly Grove, en Los Ángeles, cuando un hombre de 58 años disparó y mató a su hermano mayor para proteger a su madre de 80 años, quien estaba siendo atacada violentamente. Según informó el Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD), el hecho ocurrió el pasado viernes 7 de marzo en una residencia ubicada en la cuadra 400 de North Alfred Street, alrededor de la 1:30 p.m.
De acuerdo con los reportes policiales, el conflicto comenzó cuando el hijo mayor, de 61 años, llegó a la casa de su madre portando un bate de béisbol. Según detalló el detective Samuel Marullo, el hombre utilizó el bate para romper ventanas y destruir pertenencias de la mujer, además de amenazarla y posiblemente golpearla. En medio de la agresión, la madre logró realizar una llamada de auxilio a su hijo menor, quien se encontraba trabajando cerca del lugar.
Cuando el hijo menor llegó a la vivienda, se encontró con una escena alarmante: su hermano mayor estaba sobre su madre, asfixiándola mientras la mantenía en el suelo.
Según consignó el LAPD, el hombre intentó inicialmente detener el ataque disparando un tiro de advertencia al aire con una escopeta que había traído consigo desde su lugar de trabajo. Sin embargo, el agresor continuó estrangulando a la mujer, lo que llevó al hijo menor a disparar directamente contra su hermano, causándole la muerte.
El detective Marullo explicó que la acción del hombre fue crucial para salvar la vida de su madre, quien, debido a su avanzada edad, podría haber fallecido como resultado del ataque. “El tirador salvó la vida de su madre. No tuvo otra opción más que matar a su propio hermano. Ser asfixiada a los 80 años, con el rostro presionado contra el suelo, habría sido fatal”, afirmó.
Tras el disparo, el hijo menor permaneció en la escena y cooperó plenamente con las autoridades. Según informó el LAPD, el hombre fue detenido inicialmente, pero se espera que sea liberado, ya que el caso está siendo tratado como un homicidio justificable y no como un acto criminal.
“Este es un caso de homicidio justificable, no un asesinato”, declaró Marullo.La madre, quien sufrió una lesión en la cabeza durante el ataque, fue trasladada a un hospital local para recibir atención médica. Según los informes, se espera que se recupere y sea dada de alta en los próximos días.

El incidente ha dejado a los residentes de Beverly Grove consternados. Un vecino, identificado como Vincent Scarelli, relató haber escuchado los disparos y describió el sonido como el de una escopeta, no de una pistola.
“Fue como una escopeta. No sonaba como una pistola. Eran sonidos profundos y fuertes, y fueron dos disparos. Es una tragedia para esa familia”, expresó Scarelli, según consignó NBC News.
Aunque las autoridades no han revelado los nombres de los involucrados ni los detalles específicos que originaron la disputa familiar, el caso sigue bajo investigación. La policía continúa recopilando información para esclarecer completamente los hechos.
Mientras la madre se recupera físicamente de sus heridas, la familia enfrenta ahora las secuelas emocionales de un evento que ha dejado una marca imborrable. La pérdida de un hijo y hermano, aunque en circunstancias extremas, es una tragedia que difícilmente podrá ser superada.
Este caso también resalta la importancia de abordar los conflictos familiares antes de que escalen a niveles de violencia irreparables. El vecindario de Beverly Grove, conocido por su tranquilidad, se encuentra ahora en el centro de una historia que ha captado la atención de los medios locales y nacionales. Las autoridades continúan investigando para cerrar el caso, mientras los residentes intentan procesar lo ocurrido en su comunidad.