
Apple invertirá 100.000 millones de dólares adicionales en Estados Unidos, lo que eleva su compromiso total a 600.000 millones de dólares durante los próximos cuatro años, según anunció el miércoles el presidente estadounidense, Donald Trump.
Trump anunció el aumento del compromiso en la Casa Blanca junto al director ejecutivo del gigante tecnológico, Tim Cook, y lo calificó como “la mayor inversión que Apple ha realizado en Estados Unidos”.
“Apple aumentará masivamente el gasto en su cadena de suministro nacional”, añadió Trump, destacando una nueva planta de producción de vidrio para las pantallas de los iPhone en Kentucky.
En febrero, Apple anunció que gastaría más de 500.000 millones de dólares en Estados Unidos y contrataría a 20.000 personas, y Trump se atribuyó rápidamente el mérito de la decisión.
Se basa en los planes anunciados en 2021, cuando la empresa fundada por Steve Jobs dijo que invertiría 430.000 millones de dólares en el país y crearía 20.000 puestos de trabajo.
“Solo este año, los fabricantes estadounidenses están en camino de fabricar 19.000 millones de chips para Apple en 24 fábricas de 12 estados diferentes”, dijo Cook en el Despacho Oval.
Trump, que ha presionado a las empresas estadounidenses para que trasladen la fabricación a su país imponiendo aranceles a sus socios comerciales, afirmó que su administración era la responsable de la inversión.
“Este es un paso importante hacia el objetivo final de garantizar que los iPhones que se venden en los Estados Unidos de América también se fabriquen en Estados Unidos”, dijo Trump.
Cook aclaró más tarde que, aunque muchos componentes del iPhone se fabricarán en Estados Unidos, el montaje completo de los iPhones seguirá realizándose en el extranjero.
“Si nos fijamos en la mayor parte, aquí fabricamos muchos de los semiconductores, aquí fabricamos el vidrio, aquí fabricamos el módulo Face ID... y lo hacemos para productos que se venden en otras partes del mundo”, dijo Cook.
Regaló a Trump una pieza de vidrio grabada a medida producida por el fabricante de vidrio para iPhone Corning, engastada en una base de oro de 24 quilates.
Cook dijo que la pieza de vidrio fabricada en Kentucky fue diseñada por un ex cabo de la Infantería de Marina que ahora trabaja en Apple.
Después de recibirla, Trump dijo que era “agradable” que “ahora estemos haciendo estas cosas en Estados Unidos, en lugar de en otros países, países lejanos”.
Trump ha dicho en repetidas ocasiones que planea imponer un arancel del “100 %” a los semiconductores importados, una de las principales exportaciones de Taiwán, Corea del Sur, China y Japón.
“Vamos a imponer un arancel muy elevado a los chips y los semiconductores”, declaró a los periodistas en la Casa Blanca.
El gigante taiwanés TSMC, el mayor fabricante de chips por contrato del mundo, que cuenta con Nvidia y Apple entre sus clientes, estaría “exento” de esos aranceles, ya que tiene fábricas en Estados Unidos, según informó Taipéi el jueves.
Aunque no ofreció un calendario para la entrada en vigor de los nuevos gravámenes tecnológicos, el martes dijo que los nuevos aranceles sobre los productos farmacéuticos, los semiconductores y los chips importados podrían darse a conocer en la próxima semana.
Estados Unidos “va a ser muy rico y empresas como Apple están volviendo a casa”, afirmó Trump.
Trump especificó además que “Apple ayudará a desarrollar y fabricar semiconductores y equipos de semiconductores en Texas, Utah, Arizona y Nueva York”.
Señaló que si las empresas tecnológicas se comprometen a fabricar sus productos en Estados Unidos, “no habrá ningún cargo”.
Apple reportó una ganancia trimestral de 23.400 millones de dólares a finales de julio, superando las previsiones a pesar de enfrentarse a mayores costos debido a los aranceles generalizados de Trump.
(Con información de AFP)