Trump padece insuficiencia venosa crónica

La Casa Blanca confirmó este jueves que el presidente Donald Trump, de 79 años, fue diagnosticado con insuficiencia venosa crónica tras someterse a una serie de estudios médicos por precaución, pero aseguró que su estado general de salud es “excelente”.

El anuncio se produjo luego de que medios estadounidenses publicaran imágenes del mandatario con un moretón visible en una mano y una leve inflamación en las piernas, lo que desató especulaciones sobre su estado físico.

En respuesta, la portavoz presidencial, Karoline Leavitt, explicó que el presidente fue evaluado “exhaustivamente” y que las pruebas descartaron cualquier complicación grave.

“El presidente se mantiene en excelente estado de salud, algo que creo que todos ustedes presencian a diario”, afirmó Leavitt en una rueda de prensa.

Según detalló, Trump fue sometido a estudios vasculares, incluyendo ecografías Doppler venosas bilaterales, que detectaron una insuficiencia venosa crónica “AB 9”, una condición común en personas mayores de 70 años.

Leavitt precisó que no se hallaron señales de trombosis venosa profunda, enfermedad arterial, insuficiencia cardíaca ni renal. “No hay indicios de enfermedades sistémicas”, añadió, en referencia a los exámenes de laboratorio realizados como parte del chequeo.

Respecto a las imágenes difundidas en los medios, la vocera reconoció la presencia de “un ligero hematoma en el dorso de la mano”, el cual atribuyó a una leve irritación de los tejidos blandos provocada por los “frecuentes apretones de mano” y el uso preventivo de aspirina.

El parte médico se produce en medio de un clima de escrutinio sobre la salud de los líderes políticos estadounidenses, meses después de que se revelara el diagnóstico de cáncer del expresidente Joe Biden, de 82 años.

La oposición republicana ha acusado reiteradamente al anterior Gobierno demócrata de ocultar información médica durante su paso por la Casa Blanca.

Por eso, Leavitt defendió la transparencia de la actual administración y subrayó que Trump “trabaja sin descanso” y no presenta síntomas que interfieran con sus funciones.