El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, le dio este lunes a su homólogo ruso, Vladimir Putin, un nuevo plazo de "10 o 12 días" para terminar la guerra en Ucrania si no quiere enfrentar nuevas sanciones, en el marco de su reunión con el primer ministro británico, Keir Starmer, en Escocia.
Además, el mandatario estadounidense habló nuevamente sobre la crítrica situación en Gaza y prometió más ayuda humanitaria, incluyendo la apertura de "centros de distribución de alimentos".
Sentado junto a Starmer en su lujoso campo de golf en Turnberry, al sur de Glasgow, Trump dijo que está "muy decepcionado" con Putin por los continuos ataques a objetivos civiles ucranianos.
Anunció una reducción del plazo anterior de 50 días para que Putin pusiera fin al conflicto en Ucrania a "unos 10 o 12 días", comenzando de inmediato. "No hay razón para esperar", dijo Trump.
"Realmente sentí que iba a terminar. Pero cada vez que pienso que terminará, vuelve de nuevo. "Ya no estoy tan interesado en hablar (con él) otra vez", agregó.
El mandatario estadounidense dijo que está considerando sanciones "secundarias"; es decir, que afectarían a los países que compran productos rusos, como los hidrocarburos, para afectar a los ingresos de Moscú.
Kiev reaccionó rápidamente agradeciendo su mensaje de "firmeza".
Situación de calamidad
Trump y Starmer centraron también su reunión bilateral en la idea de revertir la situación en Gaza, que se agudiza tras el rechazo al diálogo del grupo terrorista Hamás, que sólo desea la guerra.
El mandatario estadounidense dijo que un alto el fuego es "posible" y reconoció que mucha gente "muere de hambre" y anunció la creación de unos "centros de comida".
"Vamos a conseguir buena comida fuerte, podemos salvar a mucha gente. Es un verdadero caso de inanición", prometió.
Ambos también dialogaron sobre la implementación del acuerdo comercial entre el Reino Unido y Estados Unidos que fue firmado el 8 de mayo y que redujo los aranceles para ciertas exportaciones británicas, pero que aún no ha entrado en vigor.
Trump recibió a Starmer y su esposa Victoria bajo estricta seguridad en Turnberry, donde había pasado dos días jugando golf desde que llegó a Escocia el viernes por la noche para una visita de cinco días.
Sus conversaciones se produjeron después de que Estados Unidos y la Unión Europea alcanzaran un acuerdo histórico para evitar una guerra comercial a gran escala por los aranceles tras una visita de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, a Trump el domingo en su complejo.
Trump y Starmer hablan sobre comercio
El presidente estadounidense insinuó que no impondrá altos aranceles a los productos farmacéuticos británicos.
"Ciertamente nos sentimos mucho mejor con su país trabajando en productos farmacéuticos para Estados Unidos que con algunos de los otros países", le dijo a Starmer.
Londres ya recibe un trato más favorable que otros socios internacionales de parte de Washington, con aranceles limitados al mínimo del 10%, incluso para el sector automovilístico
Pese a ello el gobierno británico sigue negociando exenciones para el acero y el aluminio. Actualmente, estos productos están gravados con una tasa del 25%, la mitad de la tasa del 50% aplicada al resto del mundo,
Trump se propuso en su segundo mandato cumplir la necesidad de reestructurar el comercio de Estados Unidos con el mundo, en gran desventaja hasta ahora para Washington.
El presidente Trump ya logró acuerdos con Japón, Filipinas, Indonesia y, lo más importante, la Unión Europea (27 naciones).
Se espera que los acuerdos entren en vigor el 1ro de agosto para reemplazar los aranceles propuestos con anterioridad que enfrentarían estas economías, dijo un portavoz de la Casa Blanca.
Después de su encuentro, Trump y Starmer se dirigieron juntos a Aberdeen, en el noreste de Escocia, donde el presidente estadounidense debe inaugurar un nuevo campo de golf.
FUENTE: Con información de AFP.