
Donald Trump exigió este sábado al régimen de Nicolás Maduro que reciba de regreso a los presos y pacientes de instituciones mentales venezolanos que han ingresado a territorio estadounidense. De lo contrario, advirtió que la dictadura chavista sufrirá un “precio incalculable”.
A través de un mensaje difundido en su red social Truth Social, el presidente de Estados Unidos afirmó que estas personas fueron enviadas deliberadamente por el Ejecutivo venezolano.
“Queremos que Venezuela acepte inmediatamente a todos los presos y a las personas de instituciones mentales, lo que incluye los peores manicomios del mundo, que los ‘líderes’ venezolanos han obligado a entrar en los Estados Unidos de América”, señaló el mandatario republicano.
Y agregó: “Miles de personas han resultado gravemente heridas, e incluso asesinadas, por estos ‘monstruos’. ¡Sáquenlos de nuestro país ahora mismo, o el precio que pagarán será incalculable!“.
La solicitud de Trump se produce en un contexto de creciente tensión entre Estados Unidos y Venezuela, marcado por el operativo militar de Washington en el Caribe para hacer frente al narcotráfico.
El viernes el presidente norteamericano anunció que militares del Comando Sur atacaron una embarcación que transportaba drogas a través de aguas internacionales. “Bajo mis órdenes, el Secretario de Guerra ordenó un ataque cinético letal contra un buque afiliado a una Organización Terrorista Designada que realiza narcotráfico en el área de responsabilidad del Comando Sur de los Estados Unidos”, expresó Trump en Truth Social.
El mandatario sostuvo que los servicios de inteligencia confirmaron que la embarcación transportaba narcóticos ilícitos por una ruta conocida y que pretendían “envenenar a estadounidenses”.
El video difundido por la Casa Blanca sobre el ataque, cuya autenticidad fue verificada por Reuters, muestra una lancha azul en movimiento antes y durante el impacto de un proyectil que la destruye completamente. Esta es la tercera ocasión desde agosto en que Estados Unidos anuncia la destrucción de una nave dedicada al narcotráfico cerca de Venezuela. Trump aseguró que “el ataque mató a tres narcoterroristas a bordo del buque, que se encontraba en aguas internacionales”. Nadie del personal militar estadounidense resultó herido.
El balance brindado por Trump señala que, desde el inicio de la operación, el Comando Sur ha destruido tres embarcaciones y eliminado a 17 criminales.
Mientras tanto, en respuesta al despliegue de fuerzas estadounidenses en el Caribe, el régimen de Venezuela efectuó una maniobra militar en la isla de La Orchila, según anunció el ministro Vladimir Padrino López. El funcionario calificó la acción como una “operación exitosa” necesaria para hacer frente a lo que calificó de amenaza extranjera.
El dictador Maduro, por su parte, viene sosteniendo que la movilización estadounidense representa un intento por “forzar un cambio de régimen” en Caracas e instalar un “Gobierno títere” afín a los intereses de Washington. Trump, consultado sobre esta posibilidad, negó cualquier conversación en ese sentido entre miembros de su gabinete.
El mensaje de Donald Trump solicitando la devolución inmediata de ciudadanos venezolanos considerados indeseables, y la respuesta militar en aguas del Caribe, subrayan la dimensión nacional e internacional de la estrategia de seguridad de la Casa Blanca.