Durante los últimos días, tanto en Europa como en la Argentina, se instaló una presunta ruptura en la relación entre Diego Simeone y Julián Álvarez, debido al flojo comienzo de la temporada del Atlético de Madrid. La supuesta frase que había deslizado la Araña, cuando fue reemplazado por el entrenador en el partido frente al Mallorca generó continuas especulaciones sobre el malestar del delantero en el Colchonero. Pero todo se trató de un malentendido, que el propio delantero se encargó de desmentir.
“Las palabras de la lectura de labios que me hicieron no eran las correctas. No tuvo nada que ver con lo que había dicho. Dije una mala palabra, porque estaba enojado conmigo; esa es la verdad. Es algo que siempre pasa, con esto de las redes sociales”, confesó en diálogo con DSports. Y agregó: “Está todo bien. Hay que seguir trabajando y mejorando cosas en el equipo para no dejar puntos en el camino".
Según las primeras hipótesis, el ex River había demostrado su enojo hacia el entrenador con una frase que no tuvo ninguna relación con lo planteado. “Siempre a mí”, fue la interpretación errónea que el goleador se encargó de aclarar.
“Es un jugador extraordinario. Es nuestro mejor futbolista. Lo necesitamos en su mejor versión. Tenemos que ayudarlo para que esté contento y que lo tengamos mucho tiempo en el Atlético”, manifestó el Cholo Simeone cuando se refirió a la magnífica actuación de la Araña en el duelo ante el Rayo Vallecano. Y agregó: “Nos vamos muy contentos porque el equipo fue a buscar el partido, tuvo muchas situaciones de gol. No fuimos todo lo contundentes que quisiéramos”.
“Desde el partido con el Villarreal, el equipo viene creciendo, mejorando. Hoy volvió a repetir un poco la misma situación. En el primer tiempo, partido que podíamos estar con un marcador más amplio, y terminó metiéndonos un golazo en el minuto 45, que nos hizo daño en la parte de confianza”, dijo el Cholo en conferencia de prensa.
“Hablamos en el descanso de seguir en la misma línea, buscar alternativas. Hubo un espacio que el equipo estaba como confundido, vino el 1-2 y estábamos por hacer los cambios. Entraron Marc y Matteo y el equipo jugó muy bien. Encontró caminos de ataque, sostuvo bien el partido, nos dio confianza sobre todo. A partir de ahí aparecieron los dos goles de Julián, con goles que también fallamos y después el golazo de Julián para cerrar el partido que es muchas veces lo que pasa en fútbol”, continuó.
El técnico argentino reconoció que sin los goles de su compatriota en los últimos diez minutos, todo parecía estar “mal” y estarían “hablando de otras cosas”. E insistió: “Lo que está claro es que Julián es el mejor futbolista que tenemos. Necesitamos cuidarlo, que esté muchos años. Nos tiene que ayudar y nosotros le tenemos que ayudar para que sea aún mejor de lo que es, cada vez que es diferencial, nos ayuda mucho”.
Fue una remontada de película que terminó con un final feliz. Cuando parecía que el clima interno podría explosionar al Atlético de Madrid, el abrazo entre el Cholo y Julián despejó cualquier tipo de especulación. El alocado festejo del DT, con una corrida frenética, y el abrazo del final del partido, sepultó las dudas. La arenga perfecta para recibir al Real Madrid el próximo sábado. “Nos queda hasta mañana a las 8 ó 9 para descansar. Ese será un partido fantástico contra un rival que está jugando muy bien. Será un duro partido”, cerró el DT.