Cuando se trata de grandes torneos, el español Sergio Busquets es una fuente segura de conocimiento. El veterano, que se ha cansado de disputar algunas de las competiciones más importantes del planeta, tanto a nivel de clubes como de selecciones, está a punto de participar en otra prestigiosa ventana, ahora con el Inter Miami.
Busquets, de 36 años de edad, reconoce que el conjunto del sur de la Florida no tiene el nivel o recorrido de los que gozaban sus equipos pasados, como el Barcelona o la misma selección española, pero el jugador confía en que la garra de los rosas será suficiente para, por lo menos, brindar un buen papel en la venidera competición, que se celebrará en Estados Unidos.
"Somos un equipo con poca experiencia en este tipo de torneos, pero tenemos mucha ilusión", señaló Busquets al respecto, en declaraciones recogidas por el portal de DSports. "La palabra 'Mundial' es muy grande, significa mucho para un jugador y, sobre todo, jugar este tipo de torneos y partidos", añadió.
El Inter Miami, que debutará en la cita contra el Al Ahly de Egipto el próximo 14 de junio, tendrá muchos ojos encima por la presencia del argentino Lionel Messi en el plantel; sin embargo, está claro que las expectativas del combinado dirigido por Javier Mascherano, en un torneo que cuenta con la participación de clubes estelares como el Real Madrid, el Manchester City y el Inter de Milán, son muy limitadas.
"Sabemos que, a partir de la fase de grupos, que sí te da un poquito de margen, ya empiezan las eliminatorias contra los mejores equipos del mundo", continuó Busquets. "Así que hay que estar muy concentrados, ser un equipo sólido, tener esa experiencia y también tener un poquito de suerte que, a veces, la necesitas".
Grupo y momento
El Inter Miami y el Al Ahly forman parte del Grupo A de la renovada competición de la FIFA, junto con el Palmeiras de Brasil y el Porto de Portugal.
Miami logró recuperarse recientemente de una prolongada racha sin conseguir victorias y registró goleadas importantes en sus últimos dos choques en la MLS, lo que levantó un poco la moral en el banquillo.