Sydney Sweeney saltó en paracaídas desde una altitud de 3.000 metros, destacando su escote con el traje abierto en un video que compartió con sus más de 28 millones de seguidores en redes sociales.
La actriz de 27 años realizó la maniobra acompañada por Luke Aikins, miembro del equipo Red Bull Air Force y reconocido profesional de deportes extremos, en un salto grabado ampliamente difundido luego de la positiva recepción en taquilla de su último estreno.
En ese sentido, describió la experiencia como “probablemente lo más genial que he tenido oportunidad de hacer”, en una publicación dirigida a Aikins: “Gracias @lukeaikins por un recuerdo para toda la vida”.
El instructor se ocupó de todo el procedimiento de seguridad y aseguró un aterrizaje sin contratiempos para la actriz, cuya aventura generó alto impacto entre sus seguidores y medios internacionales.

El salto se registró días después del estreno de Americana, la más reciente película protagonizada por Sweeney, en la que interpreta a una aspirante a cantante country y camarera en Dakota del Sur.
El filme ingresó 500.000 dólares durante su primer fin de semana en más de 1.100 salas en Estados Unidos y está previsto para llegar a los cines del Reino Unido en los próximos días.
El desempeño en taquilla superó las previsiones iniciales del distribuidor Lionsgate, que estima una recaudación total de 1,5 millones de dólares.
El video del salto en paracaídas atrajo la atención de la prensa anglosajona y latinoamericana no solo por el gesto audaz de la estrella de 27 años, sino también por el guiño visual en cámara al escote de Sydney Sweeney, quien seleccionó un mono de vuelo ajustado con la cremallera parcialmente abierta.
El hecho fue ampliamente replicado, con descripciones que subrayaron el contraste entre el momento extremo y el estilismo elegido, reforzando la imagen pública de la intérprete tras su papel en la serie Euphoria.
El instructor Luke Aikins tiene historial en producciones de Hollywood, habiendo realizado acrobacias para títulos como Black Widow (2021), Ant-Man and the Wasp (2018), Godzilla (2014) y Iron Man 3 (2013).
Además, Aikins se hizo conocido internacionalmente en 2016 cuando se lanzó sin paracaídas para aterrizar en una red de seguridad de 30,5 metros cuadrados.
La secuencia del salto apareció sincronizada con la promoción de Americana, cuyo paso por el circuito comercial resultó limitado por la controversia que envuelve la última campaña publicitaria de la marca American Eagle con Sweeney como protagonista.

Según reportó Infobae, el más reciente anuncio de American Eagle contó con Sydney Sweeney en una campaña destinada a promocionar su colección de jeans, pero que pronto derivó en acusaciones de “propaganda nazi” y “supremacía blanca”.
La polémica surgió del juego lingüístico entre “jeans” (vaqueros) y “genes” (material genético) en los guiones, apoyado en referencias directas a características físicas de la actriz:
“Los genes se heredan de padres a hijos, y a menudo determinan rasgos como el color del cabello, la personalidad e incluso el color de los ojos... Mis jeans son azules”, dijo la artista en uno de los clips utilizados por la marca.
El mensaje fue considerado por varias voces en redes sociales y analistas especializados como una alusión a ideologías eugenésicas.
Entre los comentarios más difundidos, se cuestionó la elección de Sweeney como imagen de campaña y la celebración de sus características fenotípicas, lo que “evoca la retórica supremacista blanca y la propaganda nazi de los años 30”, según advirtió un usuario.
Otro testimonio recogido expresa: “Tal vez soy demasiado woke, pero usar a una mujer blanca, rubia y de ojos azules para centrar tu campaña en que tiene una genética perfecta se siente raro, especialmente considerando el estado actual de Estados Unidos”.
Varias de las grabaciones muestran a Sydney Sweeney frente a un cartel con la frase “Sydney Sweeney tiene grandes genes”, aunque aparece tachando la palabra para sustituirla por “jeans”.
La campaña implicó también la creación de una línea de ropa llamada The Sydney Jean, con beneficios destinados a organizaciones de asistencia en salud mental, pero este aspecto benéfico permaneció opacado por la controversia.