Sonrió mientras su hija recibía ayuda de los socorristas y luego hizo una escalofriante confesión

La mujer cumplirá parte de su condena en el Centro Correccional de Shakopee, en el estado de Minnesota. (Crédito: Otter Tail County Detention Facility)

Una mujer de Minnesota fue condenada el pasado lunes 24 de junio a doce años y medio de prisión por el asesinato de su hija de tres años, a quien confesó haber asfixiado tras molestarse por su llanto. El crimen ocurrió en julio de 2023 en la localidad de Pelican Rapids, en el condado de Otter Tail, y causó conmoción por la crudeza de los hechos y la aparente frialdad de la madre durante los intentos por salvar a la menor.

Suad Ali, de 29 años, se declaró culpable de homicidio en segundo grado en abril de 2024. Según documentos citados por Fergus Now y Valley News Live, Ali admitió ante la policía que sofocó a la niña con sus propias manos el 10 de julio de 2023, tras perder la paciencia cuando la menor comenzó a llorar por hambre. Durante su audiencia de sentencia, la defensa y la fiscalía señalaron que Ali padece una enfermedad mental y que mostró escaso remordimiento tras el crimen.

Los registros del Departamento Correccional de Minnesota, consultados el martes por People, indican que Suad Ali está encarcelada en la prisión de Shakopee bajo el cargo de homicidio y tiene prevista su liberación supervisada para diciembre de 2031.

De acuerdo con la información policial recogida por Valley News Live, el 10 de julio de 2023, alrededor de las 21:40 horas, oficiales del sheriff del condado de Otter Tail acudieron a la vivienda de Ali en Pelican Rapids tras una llamada de emergencia. Al llegar, encontraron a un hombre identificado como Ibrahim Ali arrodillado junto al cuerpo inconsciente de la niña. Según el testimonio citado en el reporte, Ibrahim gritaba desesperado: “Ella la mató”, señalando directamente a Suad.

Mientras los servicios de emergencia intentaban aplicar maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) a la menor, Suad Ali se mantenía cerca, observando la escena. Según Fergus Now, en medio del esfuerzo por salvar a la niña, la madre sonrió. Esa actitud desconcertante quedó consignada en los documentos del caso. Pese a las maniobras, la niña fue declarada muerta poco después.

La misma noche, Ali confesó a los agentes que había sofocado a su hija porque no dejaba de llorar. También declaró que, más temprano, había intentado apuñalarla con un cuchillo, pero desistió. La policía halló un cuchillo en el brazo de un sofá cercano, confirmando parte del relato.

La declaración de culpabilidad por parte de Suad Ali fue presentada en abril de 2024, lo que allanó el camino hacia la sentencia de esta semana. Al aceptar su responsabilidad por el homicidio en segundo grado, Ali renunció a un juicio. La sentencia establecida por el tribunal ordena que cumpla dos tercios de los 12 años y medio en prisión y el resto bajo libertad supervisada, de acuerdo con KVRR.

El crimen ocurrió en una vivienda del condado de Otter Tail, en una zona residencial de Pelican Rapids. (Crédito: Facebook / Otter Tail County Sheriff's Office)

Durante la audiencia, tanto la defensa como la fiscalía hicieron énfasis en el estado mental de la acusada, aunque no se divulgaron diagnósticos específicos. El tribunal reconoció estos factores, pero también consideró la naturaleza deliberada del crimen, la admisión de intento previo de apuñalamiento y la falta de señales claras de arrepentimiento como agravantes.

Uno de los aspectos más relevantes en la audiencia de sentencia fue la situación psicológica de Suad Ali. Según los medios KVRR y Valley News Live, ambas partes del proceso coincidieron en que la mujer sufre de alguna condición mental no especificada. Esta condición no fue usada como defensa legal en el juicio, pero sí fue presentada como un elemento atenuante.

Pese a ello, los fiscales señalaron que Ali mostró escasa empatía o arrepentimiento, incluso después de su confesión. Esa frialdad, reflejada en el testimonio sobre su sonrisa durante la reanimación de su hija, fue interpretada por la acusación como una señal de conciencia plena del acto cometido.

Los hechos ocurrieron en una localidad pequeña del estado de Minnesota, lo que aumentó el impacto en la comunidad. La escena descrita por los medios locales, con un padre desesperado, una madre en calma y una niña agonizante en el suelo, motivó una respuesta inmediata de los servicios de emergencia y la apertura de una investigación criminal.

Cualquier persona que sospeche de maltrato infantil en Estados Unidos puede comunicarse con la línea nacional de ayuda de Childhelp al 1-800-422-4453, un servicio gratuito, confidencial y disponible las 24 horas en más de 170 idiomas.