El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, denunció este sábado una nueva ofensiva aérea rusa que afectó a múltiples regiones del país, incluida Bucovina, donde un ataque con drones y misiles provocó al menos cuatro muertos y más de una decena de heridos, según fuentes oficiales locales.
En un mensaje difundido a través de su cuenta en la red social X, Zelensky informó que las fuerzas rusas lanzaron cerca de 600 drones y 26 misiles crucero durante la noche, con impactos registrados “desde Járkov y Sumi” en el este, hasta Leópolis y Bucovina en el oeste.
Aunque la defensa aérea ucraniana logró interceptar “más de 20 misiles y la gran mayoría de los drones”, varios proyectiles alcanzaron infraestructura civil y edificios residenciales, detalló el mandatario.
Uno de los ataques más graves ocurrió en Chernívtsi, capital regional de Bucovina, donde, según el jefe de la administración regional, Ruslan Zaparniuk, murieron una mujer de 26 años y un hombre de 43 años por la caída de fragmentos tras el impacto de cuatro drones Shahed y un misil. Posteriormente, Zaparniuk confirmó la muerte de otras dos personas que se encontraban en estado crítico.
En total, más de diez personas resultaron heridas en Chernívtsi, entre ellas algunas de gravedad. También se registraron daños en viviendas, comercios, oficinas administrativas y vehículos. En la localidad de Storozhynets, otro dron impactó una casa y un automóvil, aunque no hubo víctimas.
El presidente ucraniano reiteró la necesidad de más defensas antiaéreas y nuevas sanciones contra Rusia, al tiempo que destacó la reanudación del envío de ayuda militar estadounidense, suspendida durante una semana por motivos internos en el Departamento de Defensa de Estados Unidos.
Zelensky confirmó el reinicio de los suministros en un discurso televisado el viernes. “El suministro se ha reanudado”, afirmó, subrayando que el Gobierno ucraniano mantiene la coordinación con Washington, especialmente con el enviado especial para Ucrania, Keith Kellogg.
La interrupción de la asistencia se debió a una revisión sobre el estado de las reservas militares estadounidenses.
Según fuentes de defensa, el Gobierno estadounidense modificó la logística de la entrega de armas a sus aliados: envía equipamiento militar a países miembros de la OTAN en Europa, los cuales posteriormente transfieren parte de este armamento a Ucrania frente a la escalada en los ataques rusos con drones y misiles.
Trump explicó que “las armas que salen van a la OTAN, y luego la OTAN va a entregar esas armas (a Ucrania), y la OTAN está pagando por esas armas”.

Por su parte, el secretario de Estado, Marco Rubio, especificó que las armas estadounidenses disponibles entre los aliados europeos pueden llegar a Ucrania mucho más rápido que si se trasladaran directamente desde Norteamérica.
Rubio comunicó que “es mucho más rápido trasladar algo, por ejemplo, de Alemania a Ucrania, que pedirlo a una fábrica (estadounidense) y llevarlo allí”, destacando la urgencia en las entregas dado el aumento de los ataques rusos recientes.
(Con información de Europa Press y AFP)