La más reciente gestión tuvo lugar en Roma, donde Orlando Gutiérrez Boronat, secretario general de la ARC, realizó una serie de reuniones estratégicas con diplomáticos, analistas políticos, funcionarios gubernamentales y periodistas italianos.
La gira romana forma parte de una estrategia más amplia que la ARC desarrolla desde 2023 para concientizar a las instituciones europeas sobre lo que se la organización considera un subsidio indebido a la dictadura de La Habana.
Según Gutiérrez Boronat, estas gestiones buscan evidenciar ante los europeos que están “financiando a un régimen que está enviando tropas con mercenarios cubanos para apoyar la agresión rusa contra Ucrania”.
Las actividades en Roma incluyeron una mesa redonda con diplomáticos y periodistas, reuniones con representantes del gobierno italiano y sesiones de trabajo en el Parlamento de ese país.
Esta visita se suma a una serie de gestiones que la organización ha realizado en múltiples capitales europeas, incluyendo Bruselas, Madrid y Vilnius, donde se han presentado evidencias sobre las violaciones de derechos humanos en Cuba y la participación del régimen en conflictos internacionales.
Mercenarios cubanos en Ucrania
Un elemento central de la campaña de la ARC son las recientes revelaciones de la inteligencia militar ucraniana sobre el reclutamiento masivo de ciudadanos cubanos por parte de Rusia.
En mayo, la organización, junto con el parlamentario ucraniano Maryan Zablotskyy, denunció que Rusia habría reclutado hasta 20.000 cubanos para combatir en la guerra contra Ucrania, con un saldo de entre 200 y 300 fallecidos.
Las estimaciones provienen de datos de la Dirección General de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania, que difundió una lista de 1.028 mercenarios cubanos con contratos con las Fuerzas Armadas Rusas entre junio de 2023 y febrero de 2024.
Según estas fuentes, las autoridades ucranianas calculan que el régimen cubano ha enviado directamente al 40% de estas tropas, mientras que el resto llega mediante sobornos, engaños o coerción, con promesas de trabajo como constructores u obreros con salarios entre 2.000 y 2.500 dólares mensuales.
Acuerdo con la UE
El ADPC entre la UE y Cuba, firmado el 12 de diciembre de 2016, puso fin a la llamada "Posición Común" que había condicionado las relaciones europeas con la isla al avance en materia de derechos humanos desde 1996.
Este acuerdo, que entró en aplicación provisional en noviembre de 2017, estableció un marco para el diálogo político, la cooperación comercial y el desarrollo.
Actualmente, la UE financia aproximadamente 80 proyectos en Cuba con un presupuesto de casi 155 millones de euros. Entre los más recientes se encuentra el proyecto "Cuba Digital", liderado por Estonia con un presupuesto de 3 millones de euros y una duración de cuatro años, destinado a modernizar los servicios públicos digitales en la isla.
Adicionalmente, en 2024 la UE aprobó 4 millones de euros en ayuda humanitaria para Cuba tras diversos desastres naturales.
Creciente apoyo europeo
Los esfuerzos de la ARC han encontrado eco en diversos Parlamentos europeos. En marzo de 2024, casi un centenar de legisladores de Europa firmaron una carta exigiendo a la UE que ponga fin al ADPC con Cuba, bajo el argumento de que el acuerdo no ha mejorado la situación de los derechos humanos en la isla, donde más de mil personas cumplen condenas por motivos políticos.
El gobierno de Suecia ha sido particularmente crítico del financiamiento europeo a Cuba. En febrero, el ministro de Comercio y Desarrollo Internacional de Suecia, Benjamin Dousa, anunció que Suecia, junto con otros países europeos, pedirá a la UE el cese del financiamiento al régimen cubano.
Asimismo, el Senado de Chile se sumó a estas demandas en noviembre de 2024, pidiendo el fin del financiamiento de la UE al régimen cubano y solicitando otras medidas significativas para la libertad de Cuba.
Reuniones de alto nivel
La estrategia de la ARC ha incluido reuniones con altos funcionarios europeos. En abril, Gutiérrez Boronat se reunió con Andrius Kubilius, comisario europeo de Defensa y Espacio, en Valencia, España, durante el Congreso del Partido Popular Europeo.
En esta reunión, el líder de la ARC planteó la injerencia cubana en la invasión rusa a Ucrania y la estrecha relación militar entre Cuba y Bielorrusia.
"Sí puedo decir que, a raíz de esta reunión, la resistencia cubana tiene puertas abiertas y acceso a uno de los comisionados claves de la Unión Europea", declaró Gutiérrez Boronat tras el encuentro.
La ARC también logró pronunciar un discurso ante el pleno del Partido Popular Europeo, grupo parlamentario que tiene la mayoría de los escaños en el Parlamento Europeo.
“Fondos para represión”
La crítica de la ARC se centra en que organizaciones cubanas que reciben financiamiento europeo están vinculadas al aparato represivo del Estado.
El diputado sueco Björn Söder documentó cómo la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), que recibe fondos de la UE, "utilizó su infraestructura y recursos para identificar a los manifestantes" durante las protestas del 11 de julio de 2021 y "hacer que fueran procesados".
De manera similar, la Asociación Nacional de Pequeños Agricultores (ANAP) de Cuba, otra organización financiada por la UE, estuvo involucrada en ataques contra activistas en sus hogares como parte de "actos de repudio" en la provincia de Las Tunas en mayo de 2021.
La campaña de la ARC se produce en un contexto de creciente escrutinio internacional hacia las políticas europeas hacia Cuba. La organización anunció que continuará sus gestiones para lograr que la Comisión Europea reconsidere el ADPC, después de haber obtenido el apoyo del Parlamento Europeo.