A punto de iniciar una nueva gira internacional, Rod Stewart afirma con honestidad que no tiene sueños pendientes ni desea dar un giro radical a su vida profesional. El célebre músico británico, que celebró su 80 cumpleaños en enero, ofreció declaraciones a la revista PEOPLE en las que se muestra plenamente satisfecho con su legado y describe una vida rebosante de logros, afectos y pasión intacta por la música.
Al mirar hacia atrás, Stewart ofrece una visión sosegada de su carrera. El artista asegura que ya no le quedan desafíos por cumplir y que no existe ninguna meta profesional que ansíe conquistar. “Estoy muy contento con mis logros hasta ahora”, afirmó en la entrevista, refrendando la sensación de haber vivido una trayectoria completa y fecunda. Con más de 250 millones de discos vendidos y un Grammy en su haber, Stewart no necesita más reconocimientos para sentirse realizado.
Esta percepción de plenitud se expresa en palabras directas y tranquilas: “No hay una lista de cosas por hacer… Lo he hecho todo”. La falta de inquietudes pendientes no implica, sin embargo, que haya perdido el entusiasmo por la vida artística. “Sigo disfrutando de lo que hago. Me encanta. Se me nota en la cara”, apuntó, insistiendo en que la pasión por la música sigue latiendo pese a que es consciente del paso del tiempo y reconoce que “todo tiene un final”.
Pese a estar inmerso en una gira de despedida nombrada “One Last Time”, Rod Stewart se resiste abiertamente a la idea de la jubilación. No planea alejarse de los escenarios ni del estudio musical a corto plazo. El propio Stewart afirma que aún trabaja en nuevos materiales y mantiene proyectos en marcha: “Se supone que debería estar haciendo un álbum country, y estoy a mitad de camino de hacer un álbum original”, compartió, mostrando que la creatividad no se ha extinguido en su carrera, sino que sigue explorando territorios musicales.
La agenda próxima no deja margen para el retiro. Stewart tiene previsto comenzar una gira extensa por Sudamérica y Europa el martes 7 de octubre, sumando así nuevos capítulos a su historia en los escenarios. Además, el músico acaba de cerrar la última edición de su residencia en el Caesars Palace de Las Vegas y ya tiene acordado regresar a este emblemático escenario en mayo de 2026, una cita más que reafirma su vigencia y compromiso artístico.

Cuestionado sobre la posibilidad de actuar en eventos de gran escala mediática, como el Super Bowl o una Copa del Mundo, Stewart expresó su escaso interés hacia estos formatos. “He estado en Glastonbury, así que estoy contento”, señaló aludiendo a sus participaciones en el festival británico, incluyendo ediciones recientes y la célebre de 2002. Stewart deja claro que su experiencia en escenarios tan destacados le resulta suficiente y ya no tiene aspiraciones en los macroeventos deportivos o musicales que suelen atraer a artistas de su calibre.
La postura del músico pone de relieve tanto el orgullo por el camino recorrido como la ausencia de presión por conquistar nuevos espacios en la industria. Se muestra satisfecho con sus actuaciones en festivales legendarios y no persigue experiencias adicionales para añadir a su currículum.
La faceta personal de Stewart también tuvo espacio en la charla. Tras un reciente concierto en Las Vegas, decidió celebrar en Caspian’s Cocktails & Caviar, un bar clandestino dentro del Caesars Palace, el segundo aniversario de Wolfie’s Whiskey, su propia marca de whisky. Allí demostró su buen humor y cercanía, sirviendo tragos detrás de la barra y subiéndose posteriormente al escenario para interpretar “Maggie May” y “Ooh La La” junto a la banda local, mientras recibía un pastel con la forma de su adorado whisky.
A pesar de estas celebraciones, Stewart reveló a PEOPLE que ha optado por alejarse del consumo de alcohol en busca de una voz más saludable. “Me resulta más fácil mantener mi voz en forma, y esta noche estuvo excelente. Ha estado excelente durante el último año, más o menos, desde que dejé de beber”, declaró, evidenciando la importancia que concede al auto-cuidado y la disciplina incluso en la etapa madura de su carrera.

Rod Stewart identifica varias claves en su bienestar físico y emocional. “Tengo aficiones. Hago ejercicio. Tengo mi deporte”, compartió, destacando el papel positivo que encuentra en mantenerse activo y disfrutar de pasatiempos como seguidor del fútbol y, en especial, del Celtic. Según sus palabras, “todos los hombres deberían tener una afición”, una máxima que él mismo practica con evidente satisfacción.
El entorno familiar también ocupa un lugar preeminente en su día a día. Stewart resaltó sentirse rodeado de cariño: “Tengo una familia amorosa. Tengo una esposa absolutamente hermosa”, dijo, refiriéndose a Penny Lancaster, con quien se casó en 2007, y a sus ocho hijos: Sarah, Kimberly, Sean, Ruby, Renee, Liam, Alastair y Aiden.
Al margen del brillo de los reflectores, Rod Stewart cultiva una vida rica en afectos y pasiones cotidianas. Su etapa actual refuerza un mensaje de aceptación, gratitud y continuidad, en la que la música sigue siendo motor, pero también encuentra plenitud en los afectos, la salud y el equilibrio personal.