
La salsa de soja, originaria de China y adoptada por cocinas de todo el mundo, se caracteriza por aportar un sabor profundo y armonizar una amplia variedad de platos. En Argentina, especialmente en hogares amantes de la comida asiática o fusión, cada vez más se acostumbra preparar esta salsa de manera casera para evitar aditivos y controlar el balance justo de sal y dulzura.
Si bien la versión tradicional se logra mediante una fermentación larga, esta variante rápida permite disfrutar de un perfil de sabor muy similar en minutos, ideal para emergencias culinarias o para quienes buscan una alternativa económica y personalizada.
Esta versión express de la salsa de soja consiste en combinar ingredientes accesibles que logran replicar su color oscuro, sabor salado y ese toque levemente dulce característico. Lo mejor es que no requiere tiempo de reposo, por lo que cualquier persona puede prepararla en el momento y utilizarla como aderezo, marinada o salsa para acompañar.

Para lograr el resultado más auténtico, se recomienda utilizar un caldo concentrado, azúcar mascabo y un poco de vinagre, además de especias aromáticas. La preparación es completamente sencilla: basta con mezclar y calentar unos minutos los ingredientes hasta obtener la intensidad y la textura deseadas.
El tiempo total para preparar esta salsa de soja casera es de aproximadamente 10 minutos.
- Preparación de ingredientes: 3 minutos.
- Cocción y mezclado: 5 minutos.
- Enfriado antes de usar: 2 minutos (opcional).
- 250 ml de caldo de carne o vegetal concentrado.
- 2 cucharadas de azúcar mascabo (puede ser común).
- 1/4 cucharadita de ajo en polvo.
- 1/4 cucharadita de vinagre de alcohol o manzana.
- 3 cucharadas de salsa inglesa (salsa Worcestershire).
- 1 cucharadita de sal.
- 1 cucharada de maicena (opcional, para espesar).
- 2 cucharadas de agua (solo si se usa maicena).
- En una olla pequeña, verter el caldo elegido.
- Agregar el azúcar, el ajo en polvo, el vinagre, la salsa inglesa y la sal.
- Llevar a fuego medio, revolviendo hasta que el azúcar esté completamente disuelto.
- Si se desea una salsa más densa, disolver la maicena en el agua fría y añadir a la olla, sin dejar de mezclar.
- Cocinar durante 4 o 5 minutos, hasta que la mezcla tenga color oscuro y consistencia suave.
- Retirar del fuego y dejar enfriar un par de minutos antes de utilizar.
- Guardar en un frasco limpio, preferiblemente en la heladera.

Con las cantidades propuestas, la receta rinde aproximadamente 250 ml de salsa, lo que equivale a unas 12 porciones de 20 ml cada una (ideal para salsas o marinados individuales).
Por cada porción de 20 ml, aproximadamente:
- Calorías: 20
- Grasas: 0 g
- Grasas saturadas: 0 g
- Carbohidratos: 4 g
- Azúcares: 2,5 g
- Proteínas: 0,8 g
Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.
La salsa de soja casera se puede conservar en la heladera hasta 7 días, siempre bien tapada, en un frasco o botella limpia y hermética. Si se percibe un cambio de olor o de aspecto, se recomienda desecharla.