
El pan de papa posee una rica tradición en distintas culturas del mundo. En América Latina, especialmente en países como Colombia, Perú y Argentina, suele utilizarse como base para pequeños bollos o panes que acompañan asados, sopas o simplemente se disfrutan untados con mantequilla.
Por otro lado, en los Estados Unidos, en cambio, es muy común encontrarlo como pan para hamburguesas, gracias a su textura suave y su capacidad para mantener la forma sin deshacerse. La papa, por su alto contenido de almidón, facilita una fermentación más eficaz y ayuda a conservar la frescura del pan durante más tiempo.
Esta preparación admite múltiples variaciones: puede elaborarse con o sin huevo, utilizando leche o agua, y enriquecerse con hierbas, especias o queso para obtener versiones más sabrosas y gourmet.
Una ventaja clave del pan de papa es que no necesita un amasado intensivo ni fermentaciones prolongadas, lo que lo convierte en una opción ideal para quienes están comenzando a hacer pan en casa o tienen poco tiempo.
La papa cocida ayuda a mantener la humedad, y la levadura seca rápida permite acelerar el proceso sin perder calidad en el resultado final.
Para esta receta rápida y fácil de pan de papa se necesitan aproximadamente 1 hora y 45 minutos en total:
- 20 minutos para cocer y hacer el puré de papa (o puedes usar papa ya cocida).
- 10 minutos para mezclar y amasar los ingredientes.
- 1 hora para el levado de la masa.
- 15 minutos para hornear los panes.
- 300 g de puré de papa cocida (sin manteca ni leche añadida).
- 500 g de harina de trigo común (000 o todo uso).
- 10 g de levadura seca instantánea (1 sobre).
- 1 cucharada de azúcar.5- 1 cucharadita de sal.
- 50 ml de aceite (puede ser de oliva suave o girasol).
- 200 ml de agua tibia (aproximadamente).
- 1 huevo (opcional, para pintar los panes).
- Cocinar las papas peladas en agua con sal hasta que estén tiernas. Luego, hacer un puré bien liso y deja enfriar.
- En un recipiente grande, mezclar la harina con la sal y el azúcar.
- Disolver la levadura seca en el agua tibia y reposar 5 minutos hasta formar espuma.
- Hacer un hueco en el centro de la mezcla de harina y agregar el puré de papa, el aceite y la levadura activada.
- Mezclar todo con una cuchara de madera o espátula hasta integrar. Luego amasar con las manos hasta obtener una masa suave y apenas pegajosa (se puede esparcir un poco más de harina si es necesario).
- Formar una bola, cubrir con un paño y dejar reposar en un lugar cálido durante 1 hora o hasta que duplique su volumen.
- Una vez levada, dividir la masa en bollos o forma panes alargados, y colocar en una bandeja con papel de hornear.
- Pintar la superficie con huevo batido para lograr un acabado brillante (opcional).
- Llevar al horno precalentado a 200°C durante 12-15 minutos, o hasta que los panes estén dorados por fuera.
- Dejar enfriar sobre una rejilla antes de servir.

Con estas cantidades, la receta rinde aproximadamente 8 a 10 panes pequeños o 2 panes medianos.
Cada porción (1 pan chico) contiene aproximadamente:
- Calorías: 180
- Grasas: 5 g
- Grasas saturadas: 0,5 g
- Carbohidratos: 30 g
- Azúcares: 1 g
- Proteínas: 4 g
Cabe destacar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.
El pan de papa se puede conservar en buen estado por hasta 3 días a temperatura ambiente, guardado en una bolsa o recipiente hermético. También se puede freezar por hasta 2 meses, y bastará con calentarlo unos minutos en horno o tostadora para devolverle su textura.