
Los bombones de queso crema con chocolate son una de esas delicias que sorprenden por lo fácil que resultan de preparar y lo irresistibles que son al paladar. Imagina una tarde calurosa en la que necesitas un dulce rápido y sin horno, o una ocasión especial en la que buscas regalar algo casero pero gourmet: estos bombones son tu solución perfecta.
Su textura suave, su sabor equilibrado entre lo dulce y lo salado, y su presentación elegante los convierten en una joya para compartir o disfrutar en soledad.
Este tipo de bombón ha ganado popularidad en celebraciones, mesas dulces y como detalle para regalar en fechas como San Valentín, Navidad o cumpleaños. Originados como una variación casera de los famosos “trufas”, incorporan queso crema como ingrediente principal, aportando cremosidad y un contraste delicioso con el baño de chocolate.
Se pueden personalizar fácilmente con coberturas de coco rallado, nueces, cacao amargo o incluso galletas trituradas. Ideales para preparar en familia, esta receta no requiere horno, se hace en minutos y solo necesita refrigeración.

Los bombones de queso crema con chocolate son pequeños bocados de textura cremosa y sabor envolvente. Se preparan combinando queso crema con azúcar impalpable y galletas molidas o coco rallado para formar una masa manejable. Luego se forman bolitas que se refrigeran y, finalmente, se bañan en chocolate fundido para obtener un resultado profesional y delicioso.
ave está en lograr una masa equilibrada, ni muy seca ni demasiado blanda. A partir de ahí, puedes experimentar: añadir un toque de esencia de vainilla o ralladura de naranja, usar chocolate amargo, semiamargo o blanco para el baño, o espolvorear con toppings según tu gusto. Es una receta ideal para cuando no se quiere encender el horno y se busca una opción rápida pero vistosa.
Para esta receta rápida de bombones de queso crema con chocolate necesitarás aproximadamente 45 minutos en total:
- Preparación de la masa y formado de bolitas: 15 minutos.
- Reposo en refrigerador para que tomen firmeza: 15 minutos.
- Baño en chocolate y decoración: 10 minutos.
- Reposo final en frío hasta que el chocolate se endurezca: 5 minutos.

1- 200 g de queso crema (tipo Philadelphia, bien frío).2- 100 g de azúcar impalpable (también llamada azúcar glas).3- 150 g de galletas dulces molidas o coco rallado (puedes usar mitad y mitad).4- 200 g de chocolate para fundir (puede ser negro, con leche o blanco).5- 1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional).6- Toppings opcionales: coco rallado, chips de chocolate, nueces picadas, cacao amargo.
- En un bol grande, coloca el queso crema frío y batilo unos segundos para suavizarlo.
- Añade el azúcar impalpable tamizada y mezcla bien hasta integrar.
- Incorpora las galletas molidas o el coco rallado, y mezcla hasta obtener una masa firme que no se pegue a las manos. Si está muy blanda, agrega un poco más de galleta o coco.
- Agrega la esencia de vainilla si decides usarla.
- Forma pequeñas bolitas del tamaño de una nuez con las manos ligeramente húmedas.
- Coloca las bolitas en una bandeja con papel vegetal y lleva al refrigerador por al menos 15 minutos para que endurezcan.
- Mientras tanto, derrite el chocolate a baño María o en el microondas en tandas de 20 segundos, removiendo cada vez.
- Saca las bolitas del frío y báñalas una a una en el chocolate fundido. Puedes ayudarte con un tenedor o un palillo.
- Colócalas sobre una bandeja con papel manteca y espolvorea con los toppings deseados antes de que el chocolate se enfríe.
- Lleva nuevamente al refrigerador por al menos 5 minutos o hasta que el chocolate haya endurecido por completo.

Con estas cantidades, puedes obtener entre 18 y 22 bombones, dependiendo del tamaño que les des. Es ideal para una reunión pequeña o para tener un dulce casero durante varios días.
Cada bombón (aproximadamente 1 porción) contiene en promedio:Calorías: 120Grasas: 8 gGrasas saturadas: 4 gCarbohidratos: 10 gAzúcares: 9 gProteínas: 2 gCabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.
Los bombones se conservan perfectamente en un recipiente hermético en la heladera por hasta 5 días. Se recomienda no apilarlos para evitar que se peguen o deformen. También se pueden congelar por hasta 1 mes.