Tanner Martin, el influencer estadounidense que conmovió a millones al compartir en redes sociales su lucha contra un cáncer terminal, falleció a los 30 años.
Su historia de resiliencia sumó un nuevo y triste capítulo este jueves 25 de junio, cuando su familia publicó en Instagram un video pregrabado en el que el propio Tanner comunicaba que su viaje había llegado a su fin.
“Hola, soy Tanner. Si estás viendo esto, es porque estoy muerto”, se le oyó decir en el clip.
Martin padecía cáncer colorrectal en etapa 4 desde los 25 años, diagnóstico que recibió en noviembre de 2020. Desde entonces, documentó cada etapa de su enfermedad —con honestidad brutal y sentido del humor— junto a su esposa, la terapeuta Shay Wright, a quien conoció antes de que su vida cambiara por completo.

Tanner y Shay llevaban una vida común como recién casados hasta que llegó el diagnóstico. “Ha sido una montaña rusa desde entonces”, contó Tanner a People en 2024, en una entrevista realizada durante una de sus sesiones de quimioterapia.
En cuatro años, el joven recibió más de 50 rondas de quimioterapia, otras tantas de radiación, seis cirugías mayores y decenas de procedimientos adicionales.
El tratamiento parecía tener éxito en algunos momentos: “Los médicos dijeron en un punto que el cáncer se había ido”, relató Shay.
Pero una largo internamiento por sepsis le impidió continuar con las terapias durante ocho meses, lo que llevó a que el cáncer se expandiera a los pulmones.

En febrero de 2023, los médicos confirmaron que el cáncer ya no era curable. Le dieron entre dos y cinco años de vida.
A pesar del devastador pronóstico, Tanner y Shay enfrentaron el proceso con una fuerza poco común.
Planificaron el futuro de ella más allá de su vida, contrataron una doula de muerte, organizaron un funeral en vida con alfombra roja en un cine y congelaron embriones con la esperanza de que Shay pudiera volver a convertirse en madre tras la partida de su esposo.
“Creo que es importante hablar de la muerte, especialmente para personas en mi situación. Esto es algo para lo que uno quiere prepararse. No quieres que tu pareja tenga que planear tu funeral y tal vez ni siquiera tenga suficiente dinero para hacerlo”, dijo Tanner a People.

También cumplieron sueños: renovaron votos en Irlanda, viajaron a Disney World, México e Italia, y Tanner —gran fanático de Star Wars— conoció a Mark Hamill. Él y Shay incluso se tatuaron una frase de Han Solo: “Nunca me digas las probabilidades”.
En noviembre de 2024, Shay anunció que esperaban una hija. “Es interesante porque usualmente cuando la gente se embaraza solo sienten emoción. Nosotros también estamos entusiasmados, pero también sentimos duelo, miedo y ansiedad”, declaró a People en una entrevista.
Tanner y Shay eran miembros de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, y su fe fue una fuente de consuelo constante.
El 25 de junio, la cuenta de Instagram de la familia publicó un video pregrabado por Tanner, de poco más de cinco minutos. En él, se le ve frágil pero con pensamientos positivos.

“Tuve una vida increíble”, dice con una sonrisa. “La vida fue increíble. Realmente la disfruté mientras estuve aquí… La muerte da miedo, pero también es como una nueva aventura, ¿sabes? Estoy emocionado por ver cómo es esa experiencia, y ojalá sea buena”.
“Espero que haya algo después de esto. Estoy emocionado por ver a esas personas, y ojalá estemos pasando el rato ahora, burlándonos de todos ustedes, nerds”.
Agradeció a sus seguidores: “Los amo, y en serio, gracias por todo su apoyo y por ayudarme a hacer que estos últimos años en la Tierra hayan sido divertidos, agradables y por ayudarme a estar cómodo”.
En un segundo video, grabado junto a su hija recién nacida, Tanner pidió donaciones vía GoFundMe para sostener financieramente a la niña en el futuro. Calificó ello como su último deseo.