
La Semana Santa y más aún Pascuas ofrece una oportunidad única para escapar de la rutina y conectarse con la naturaleza. La Patagonia, un territorio vasto y diverso, se presenta como el destino ideal para quienes buscaron aventura y serenidad en esta escapada XL.
Sus senderos, que atraviesan bosques milenarios, glaciares majestuosos y lagos cristalinos, permiten una inmersión total en paisajes inigualables, lo que hace de cada caminata una vivencia memorable.
Ya sea para los más aventureros, con desafiantes travesías de alta montaña, o para aquellos que buscan una escapatoria tranquila, el sur del país ofrece el entorno perfecto para disfrutar de unos días de reflexión y desconexión. Esta selección de destinos, destacada por Condé Nast, invita a explorar la inmensidad y belleza de esta región durante Pascuas, pero también para agendar como futuros destinos.

La Laguna de los Tres es un destino imperdible para los apasionados del trekking que se aventuran en la Patagonia. Situada en el Parque Nacional Los Glaciares, este refugio natural se encuentra al pie del imponente Fitz Roy. La caminata comienza en El Chaltén, donde los senderistas deben recorrer aproximadamente 20 kilómetros.
El trayecto ofrece una mezcla de paisajes: bosques, ríos cristalinos y, al final, una empinada subida que lleva al visitante a un punto panorámico con una vista única de la laguna y el monte Fitz Roy. La recompensa es, sin duda, una de las postales más representativas.

El Cerro Tronador, un volcán extinto que se erige entre Argentina y Chile, es un desafío tanto para los caminantes como para los amantes de la naturaleza. En el Parque Nacional Nahuel Huapi, los senderos que rodean este volcán permiten admirar bosques frondosos y glaciares, como el Ventisquero Negro.
La montaña, que recibe su nombre por los ruidos de los desprendimientos de hielo, ofrece distintas opciones de senderismo, desde caminatas suaves hasta expediciones más exigentes, todas acompañadas por escenarios que capturan la magnitud de la región.

Ideal para aquellos que buscan disfrutar de un paisaje patagónico sin alejarse demasiado de la ciudad, el Circuito Chico, cerca de San Carlos de Bariloche, es un recorrido fácil que combina senderismo y vistas panorámicas.
A lo largo de 25 kilómetros, ofrece miradores naturales como el Cerro Campanario y una visita a la Villa Llao Llao.

A pocos minutos de Ushuaia, el Glaciar Martial se presenta como una opción ideal para quienes desean realizar un trekking en el extremo sur. El sendero asciende suavemente por un bosque subantártico, con el Canal Beagle y la ciudad más austral del mundo de telón de fondo.
Aunque el glaciar retrocedió en los últimos años, sigue siendo impresionante, y los aventureros más experimentados pueden continuar hacia las cumbres cercanas para disfrutar de un entorno intacto.
El Refugio Frey, en el Parque Nacional Nahuel Huapi, es famoso por su ubicación junto a la Laguna Toncek, rodeada por las afiladas agujas de granito del cerro Catedral.
La caminata de 10 kilómetros parte desde la base de la elevación y lleva a los senderistas a través de bosques y arroyos, hasta llegar al refugio, que se convierte en un punto de descanso perfecto para montañistas y escaladores. La travesía, de dificultad moderada, se ofrece como una excelente introducción al senderismo de alta montaña.

En el corazón del Parque Nacional Nahuel Huapi, el Paso de las Nubes se extiende como uno de los caminos más espectaculares de la región. Uniendo Pampa Linda con el lago Frías, el recorrido atraviesa un paisaje cambiante de valles, extensas arboledas y glaciares.
Permite explorar un entorno virgen de la Patagonia, y aporta vistas ininterrumpidas de las montañas y la posibilidad de avistar cóndores mientras se disfruta de la tranquilidad de este remoto rincón.

En el Parque Nacional Patagonia, el Sendero Tierra de Colores revela una faceta distinta. Lejos de los bosques y los picos nevados, atraviesa la estepa patagónica, donde las formaciones rocosas adquieren tonos rojizos, violetas y ocres.
Este trekking de baja dificultad invita a los caminantes a perderse en la inmensidad de la meseta, con la oportunidad de observar especies autóctonas como guanacos y choiques.

El trayecto al Mirador del Cerro Torre ofrece una caminata corta pero gratificante. Desde El Chaltén, la ruta atraviesa valles y arboledas, hasta llegar a un balcón natural que permite contemplar el imponente Cerro Torre y el glaciar Grande.
En los días despejados, la vista del pico nevado y la laguna Torre es uno de los mejores panoramas de la región, un lugar ideal para los que buscan un trayecto breve con una gran recompensa visual.

El Sendero a los Arrayanes, ubicado en la península de Quetrihué, es uno de los pocos lugares en el mundo donde se puede caminar entre árboles de corteza color canela.
Este recorrido, que se puede hacer a pie o en bicicleta, ofrece una experiencia inigualable, con vistas al lago Nahuel Huapi y el entorno boscoso. El final del camino lleva a una pequeña cabaña, donde los visitantes pueden descansar mientras disfrutan del paisaje místico de los arrayanes.

En el sur de Tierra del Fuego, los lagos Escondido y Fagnano representan un refugio sin igual. El circuito de 10 kilómetros que conecta ambos lagos transita por bosques, y ofrecen escenarios espectaculares de las montañas y espejos de agua rodeados por la inmensidad de la naturaleza.
El Lago Fagnano, de grandes dimensiones, y el más íntimo Lago Escondido permiten a los caminantes disfrutar de la serenidad de la zona, perfecta para quienes buscan una caminata moderada con una atmósfera inolvidable.