
Nadine Menéndez, esposa del exsenador de Nueva Jersey Bob Menéndez, fue declarada culpable de participar en un esquema de sobornos que se extendió durante cinco años.
El veredicto fue emitido por un jurado en un tribunal federal de Manhattan tras deliberar durante siete horas a lo largo de dos días. La sentencia está programada para el 12 de junio, y Menéndez enfrenta una posible condena significativa.
El caso, que también involucra a su esposo, quien ya fue condenado en 2024 a 11 años de prisión, ha revelado un esquema de corrupción que incluyó pagos en efectivo, lingotes de oro y un automóvil de lujo.
Según consignó The New York Times, el jurado encontró a Nadine Menéndez culpable de los 15 cargos que enfrentaba, entre ellos soborno, obstrucción de la justicia y conspiración para convertir a su esposo en un agente de Egipto.
De acuerdo con Telemundo 47, las pruebas presentadas durante el juicio incluyeron 480.000 dólares en efectivo y lingotes de oro valorados en casi 150.000 dólares, encontrados en la residencia de la pareja en Englewood Cliffs, Nueva Jersey, durante una redada del FBI en 2022.
Estos bienes estaban ocultos en botas, cajas de zapatos y chaquetas. Además, en el garaje de la vivienda se halló un Mercedes-Benz descapotable, que también formó parte de los sobornos recibidos.

El fiscal federal adjunto Daniel Richenthal argumentó que estos bienes no eran regalos, sino sobornos destinados a influir en las acciones políticas de Bob Menéndez, quien ocupó cargos clave en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado. Según el fiscal, Nadine Menéndez desempeñó un papel crucial como intermediaria en el esquema, asegurándose de que su esposo estuviera al tanto de cada paso.
El esquema de sobornos no solo implicó a la pareja Menéndez, sino también a tres empresarios de Nueva Jersey, quienes buscaban favores políticos. Según detalló The New York Times, uno de los principales beneficiarios fue Wael Hana, un ciudadano estadounidense de origen egipcio, quien obtuvo un monopolio para certificar carne halal destinada a Egipto.
Este acuerdo, facilitado por la intervención de Bob Menéndez, generó grandes beneficios para Hana y su empresa IS EG Halal, que posteriormente canalizó sobornos hacia la pareja.
El caso también incluyó intentos de interferir en investigaciones criminales que amenazaban a aliados de los Menéndez, como el desarrollador inmobiliario Fred Daibes y el corredor de seguros no licenciado José Uribe.

Este último testificó que entregó un Mercedes-Benz a Nadine Menéndez como parte de un soborno para detener una investigación de fraude en la que estaban implicados sus socios comerciales.
La relación entre Nadine y Bob Menéndez comenzó en 2018, poco después de que el senador fuera absuelto en un caso de sobornos no relacionado.
Según Telemundo 47, la fiscalía argumentó que Nadine Menéndez, quien en ese momento era conocida como Nadine Arslanian, se unió rápidamente al esquema de corrupción. La pareja contrajo matrimonio en 2020, y su relación se convirtió en el eje de las acusaciones de complicidad en los delitos.
Durante el juicio, los fiscales presentaron mensajes de texto entre la pareja como evidencia de su colaboración en el esquema. En uno de estos mensajes, Nadine Menéndez celebró la compra del Mercedes-Benz con las palabras: “Felicidades, mon amour de la vie, somos los orgullosos dueños de un Mercedes 2019″.

El abogado de Nadine Menéndez, Barry Coburn, intentó desacreditar las pruebas presentadas, argumentando que no existía un vínculo directo entre los bienes encontrados y acciones oficiales realizadas por Bob Menéndez.
Según The New York Times, Coburn señaló que los mensajes de texto y otras pruebas eran insuficientes para demostrar más allá de toda duda razonable que los Menéndez sabían que estaban actuando de manera indebida.
Sin embargo, los fiscales insistieron en que la evidencia era contundente. “No necesitan un quid pro quo por escrito”, afirmó Richenthal en su alegato final, refiriéndose a la relación directa entre los sobornos y las acciones políticas realizadas por el senador.
La condena de Nadine Menéndez marca un nuevo capítulo en un caso que ya había sacudido el panorama político de Estados Unidos. Bob Menéndez renunció a su cargo en el Senado tras su condena en 2024, poniendo fin a una carrera que comenzó en 2006 y que incluyó posiciones influyentes en el Comité de Relaciones Exteriores.
Además de la pareja Menéndez, los empresarios involucrados, como Wael Hana y Fred Daibes, también enfrentaron condenas y largas penas de prisión. Según The New York Times, Bob Menéndez, quien está apelando su veredicto, deberá comenzar a cumplir su sentencia en junio.