
El 11 de abril de 2025, Aldo Martínez Gómez, un residente de California nacido en San Diego, recibió un alarmante correo electrónico del Departamento de Seguridad Nacional (DHS). En este mensaje, se le exigía abandonar Estados Unidos en un plazo máximo de siete días, bajo la amenaza de enfrentar graves acciones legales que podrían resultar en una supuesta deportación.
La notificación, que incluía el contundente mensaje “si no sale de EEUU inmediatamente, estará sujeto a posibles acciones policiales que resultarán en su expulsión del país”, dejó a Martínez confundido y preocupado, ya que nació y creció en la zona sur de California, y su certificado de nacimiento confirma que es ciudadano estadounidense.
“Nací en el Hospital Paradise Valley en National City y crecí toda mi vida en Chula Vista”, explicó Martínez, quien ahora se ve obligado a contemplar la posibilidad de ser detenido mientras representa a sus clientes en los tribunales de inmigración, según expresó en diálogo con NewsNation.

El trabajo de Martínez en una organización sin fines de lucro que ayuda a personas en procesos legales de inmigración se ha visto trastocado por este mensaje del DHS, que lo dejó en una situación incierta.
El correo electrónico enviado por el DHS detallaba que, de no abandonar Estados Unidos de inmediato, Martínez estaría sujeto a acciones de ejecución de la ley, lo que podría resultar en su “expulsión” del país.
La carta decía en otra parte: “No intente permanecer en Estados Unidos”, asegurando que el gobierno federal “lo encontrará”.
“¿Adónde quieren que vaya. Nací en National City. Crecí en el condado de San Diego toda mi vida. Cuando represento a personas en la corte de inmigración, siempre hay un oficial de ICE cerca. ¿Me detendrán cuando represente a un cliente en una audiencia? ¿Vendrán a mi casa?“, expresó Martínez.
Este tipo de notificación no es un caso aislado. Otros ciudadanos estadounidenses, como Tom Frantz de Wisconsin, también han recibido correos electrónicos similares por error.
Frantz, nacido en Estados Unidos, recibió una carta del DHS en la que se le informaba que debía abandonar el país debido a que “su libertad condicional” había sido cancelada, a pesar de que nunca fue acusado de ningún crimen.
“Soy ciudadano legal de EEUU, nunca me han acusado de un crimen, mucho menos de estar bajo libertad condicional”, comentó Frantz, quien al igual que Martínez, se sintió intimidado y alarmado por el tono del mensaje.
Estas preocupaciones orillaron a Martínez a prepararse para lo peor.

El DHS respondió a la preocupación pública indicando que el error ocurrió debido al uso de correos electrónicos no personales de los destinatarios.
Si un individuo proporcionó un correo electrónico general o no vinculado a su identidad, las notificaciones pudieron haber sido enviadas a destinatarios equivocados, según explicó un alto funcionario del DHS, luego de que el medio hiciera una solicitud de comentarios.
Un caso que también hace eco es el de Nicole Micheroni, abogada de inmigración nacida en Estados Unidos que, por culpa de un error administrativo, recibió una notificación oficial que ordenaba abandonar el país en siete días.
Como reportó Infobae a mediados de abril, Micheroni inicialmente pensó que era un mensaje relacionado con uno de sus clientes, sin embargo, pronto descubrió que el único nombre que se mencionaba en el documento era el suyo.
“Decía que mi libertad condicional había sido cancelada y que debía salir del país en siete días”, explicó la abogada de migración en diálogo con NBC10.