
Las autoridades de Luisiana confirmaron cinco muertes y más de dos decenas de hospitalizaciones relacionadas con un brote de la bacteria Vibrio vulnificus en las últimas semanas, según información oficial y reportes de prensa internacional. El aumento de casos ha obligado a las autoridades sanitarias a reforzar las advertencias dirigidas a toda la población, especialmente a quienes visitan zonas costeras o consumen mariscos.
De acuerdo con el Departamento de Salud de Luisiana (LDH), hasta el 16 de septiembre se registraron 26 infecciones graves por esta bacteria, más del doble de los casos y muertes del promedio anual. El brote representa un cambio respecto a años anteriores, cuando los afectados por la enfermedad eran considerablemente menos, en su mayoría adultos con condiciones de salud preexistentes. Medios como PEOPLE y la agencia estadounidense AP han replicado detalladamente las cifras y la advertencia sanitaria, respaldando la información oficial.
Los antecedentes de infecciones por Vibrio vulnificus suelen vincularse a la exposición o consumo de productos del mar crudos, sobre todo ostras, o por contacto entre agua salobre y heridas abiertas. Las autoridades estatales recordaron que este microorganismo puede encontrarse en aguas cálidas y costeras, particularmente desde fines de la primavera hasta el otoño. Las infecciones pueden avanzar rápidamente y provocar cuadros críticos.
La Vibrio vulnificus es una bacteria presente en ambientes marinos, frecuentemente en aguas salobres o cálidas. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), esta bacteria puede ingresar al organismo al consumir mariscos crudos, especialmente ostras, o si una herida entra en contacto con el agua contaminada. El Departamento de Salud de Luisiana precisó que el 85% de los contagiados en el actual brote sufrieron exposición mediante una herida, mientras que el resto contrajo la infección tras ingerir mariscos poco cocidos.
De acuerdo con PEOPLE, los síntomas iniciales suelen ser trastornos digestivos como “diarrea acuosa, cólicos, náusea y fiebre”, aunque en casos graves progresa hacia infecciones tisulares que requieren atención médica inmediata. El CDC ha informado que las infecciones severas pueden derivar en fascitis necrosante y provocar la amputación de extremidades en situaciones críticas.

Especialistas de los CDC y del LDH advierten que personas con enfermedades crónicas, como cáncer, diabetes, VIH o quienes toman inmunosupresores, presentan mayor probabilidad de enfrentar complicaciones graves. No obstante, los reportes oficiales recientes recabados por AP subrayan que “cualquier persona puede infectarse”, independientemente de sus antecedentes médicos. El LDH aclaró que, si bien la mayoría de infectados presentan comorbilidades, la magnitud del brote actual justifica reforzar las recomendaciones para la población en general.
PEOPLE señaló que el número de casos reportados en 2025 dobla el promedio de años anteriores y detalló que las medidas se enfocan tanto en turistas como en residentes habituales de zonas costeras.
Según el Departamento de Salud de Luisiana, el estado pasó de reportar 10 casos y una muerte en 2024 a 26 casos y cinco muertes hasta el 16 de septiembre de 2025. Estos datos fueron ratificados por AP. Todos los afectados debieron recibir hospitalización. Las autoridades advirtieron que estados vecinos también han experimentado incrementos y, por ello, extreman la vigilancia en el Golfo de México.

El Departamento de Salud de Luisiana recomendó evitar la exposición de heridas abiertas a agua salada o salobre. Se aconseja usar vendajes impermeables para cubrir cualquier corte, raspadura, tatuaje reciente o piercing si existe posibilidad de contacto con agua costera o con mariscos crudos. Las autoridades sanitarias agregan que es fundamental lavar la piel con agua y jabón tras potenciales exposiciones y cocinar completamente todos los productos del mar, especialmente ostras.
El personal del CDC recalcó: “El consumo de mariscos crudos representa un riesgo innecesario de infección”, apelando tanto a consumidores locales como a turistas.
Los síntomas leves incluyen diarrea, fiebre, dolor abdominal y vómito, pero la infección puede avanzar rápidamente y, en casos severos, causar infecciones en la sangre o en los tejidos blandos. Según PEOPLE, estos cuadros agravan la posibilidad de cuadros clínicos severos, como fascitis necrosante, con riesgo de amputación de extremidades. El Departamento de Salud de Luisiana aconsejó buscar atención médica inmediata ante la presencia de dolor, hinchazón, enrojecimiento o llagas tras contacto con agua de mar o consumo de mariscos crudos.

El incremento de casos motivó que las autoridades reforzaran protocolos de vigilancia epidemiológica, exigieran la notificación obligatoria de casos sospechosos y promovieran campañas públicas sobre riesgos y prevención. Según el LDH, se continúa informando a comunidades y profesionales de salud acerca de medidas actualizadas y criterios de detección temprana.
Instituciones como TIME y AP informaron que la vigilancia se incrementó en toda la zona del Golfo ante el riesgo de expansión interestatal, mientras el CDC y los departamentos de salud locales monitorean la evolución del brote.
El brote de Vibrio vulnificus en Luisiana generó una alerta pública para turistas y residentes en la Costa del Golfo, quienes deben estar atentos tanto a la ingesta de mariscos como a la exposición de heridas en ambientes acuáticos costeros. Las autoridades educativas y sanitarias mantienen la difusión de advertencias y recomendaciones, remarcando que la prevención y vigilancia permiten reducir la posibilidad de contagio en lo que resta de la temporada.