
Mariah Carey y Eminem han sido protagonistas de uno de los enfrentamientos mediáticos más notorios de la industria musical, marcado por años de rumores y referencias cruzadas. Sin embargo, la reciente aparición de la cantante en el programa “Watch What Happens Live” con Andy Cohen aportó una perspectiva distinta sobre este prolongado conflicto.
Allí, Carey abordó el tema restando importancia tanto a la supuesta disputa como a los rumores persistentes sobre el origen de su relación con el rapero de Detroit, asegurando que el asunto carece de verdadera relevancia en su vida.
“No. Tal vez. Depende de lo que él esté pensando. Realmente no me importa lo que haya dicho entonces, está bien. No realmente, pero eso es una letra de rap”, señaló al centrarse en la rivalidad mediática de la que fueron protagonistas.

Durante la entrevista televisiva, Andy Cohen preguntó a Carey por la antigua especulación de que había rechazado interpretar a la madre de Eminem en la película “8 Mile”, estrenada en 2002. Este tema volvió a la agenda pública cuando Damion “Damizza” Young, productor musical, reveló en el pódcast de TFU que la negativa de Carey habría generado tensiones entre ambos artistas.
La versión sostenida por Young afirmaba que Eminem quería que la cantante encarnara el papel de su madre, a pesar de la reducida diferencia de edad. Como consecuencia, el rol fue adjudicado finalmente a Kim Basinger.
Ante la pregunta directa, Carey respondió con evasivas y descartó la importancia del asunto, admitiendo en tono distante que, según había escuchado, “hay algo de cierto en eso”, aunque no precisó detalles y puso en duda quién estableció el primer contacto para la posible oferta. La cantante insistió en que el tema no le preocupa y que, para ella, se trata de un hecho menor en su dilatada carrera.

Según Damion Young, el episodio de la película reflejaría las inseguridades del rapero tras la negativa de Carey, lo que habría propiciado una relación personal de corta duración entre ambos.
Esta versión, recogida por Complex, se presenta más como una interpretación personal del productor que como un testimonio consolidado. En ningún momento los propios involucrados confirmaron el desarrollo de dicha relación sentimental.
El relato de Young también resalta el impacto que la situación supuestamente tuvo en Eminem. Según el productor, la negativa habría afectado el ego del rapero, quien posteriormente canalizó sus frustraciones a través de su música, sumando referencias constantes a Mariah Carey en sus composiciones.

Las alusiones musicales no tardaron en llegar. Eminem incluyó mensajes dirigidos a Carey en canciones como “When the Music Stops” y “Superman”, presentes en su álbum “The Eminem Show” de 2002.
Estas menciones alimentaron la especulación y consolidaron la idea de una posible relación entre ambos artistas, reforzando el tema en la prensa y entre los fanáticos.
Frente a esta ola de rumores, Mariah Carey optó por negar sistemáticamente cualquier vínculo sentimental de peso con Eminem.
En una entrevista con Larry King ese mismo año, la cantante declaró de manera categórica: “Probablemente salimos un total de cuatro veces. Y no considero que eso sea salir con alguien”, recordó el medio Complex. Este tipo de aclaraciones se convirtieron en la respuesta recurrente de Carey cada vez que el tema resurgía.

En 2009, Carey presentó el videoclip “Obsessed”, donde parodia a un acosador, personaje que fue interpretado por muchos como una clara alusión a Eminem.
A partir de entonces, la artista consolidó su distancia respecto al tema, utilizando la ironía y el arte para zanjar la polémica de manera pública. El videoclip se transformó en un símbolo de su postura: tomar el control narrativo y afrontar el conflicto con humor y distancia.
Más allá de las bromas y las referencias, Carey insiste en que el enfrentamiento con Eminem no ocupa espacio real en su vida. Su actitud desenfadada y sus recientes declaraciones reafirman que, para ella, la controversia pertenece al pasado y no tiene peso en su presente ni en su carrera.

La difusión constante de rumores, las letras de rap y las interpretaciones periodísticas han mantenido vigente la historia, a pesar de la desestimación de sus protagonistas.
Carey se muestra consciente de cómo la cultura popular y los medios amplifican ciertas disputas, pero deja en claro que su vida y obra trascienden estas polémicas circunstanciales.
Con una trayectoria consolidada y numerosos éxitos a lo largo de las décadas, Mariah Carey reafirma que las historias de su supuesto conflicto sentimental con Eminem forman parte del historial mediático, más no de su realidad personal.
Así lo constató en sus recientes declaraciones, subrayando que el asunto nunca ha tenido la importancia que se le atribuye, y prefiere concentrarse en nuevos proyectos y en su legado artístico.