
Los ataques de perros contra trabajadores del Servicio Postal de Estados Unidos (USPS) superaron los seis mil casos en 2024, informó la agencia gubernamental en un comunicado oficial. La cifra representa un aumento de al menos 200 incidentes con respecto al año anterior, lo que refuerza la preocupación de las autoridades postales por la seguridad de sus empleados.
California fue el estado con más reportes, con un total de 701 incidentes, seguido por Texas con 438 y Ohio con 350. La lista de los diez estados más afectados también incluye a Illinois, Nueva York, Pensilvania, Michigan, Florida, Misuri y Carolina del Norte. Las cifras fueron dadas a conocer por el USPS como parte de una semana de concientización nacional sobre seguridad laboral, enfocada particularmente en prevenir mordeduras de perros.
“La mejor forma de mantenerse a salvo de ataques de perros es promover la responsabilidad de tener una mascota”, señaló Leeann Theriault, gerente de concientización sobre salud y seguridad de los empleados del USPS, en declaraciones incluidas en el comunicado. “Enseñarles a los perros comportamientos adecuados y comandos, y no permitir que deambulen libremente, es fundamental”.

En el desglose por ciudades, Los Ángeles ocupó el primer lugar en 2024 con 77 ataques, seguida por Houston con 65 y Chicago con 57. También se reportaron altos números en St. Louis (47), Cincinnati (44), Dallas (43), Kansas City (40), Cleveland (40), San Diego (35) y Denver (34).
Los ataques no solo representan un riesgo físico para los carteros, sino que también pueden provocar interrupciones en el servicio de correo. Las recomendaciones de la agencia incluyen asegurar a los perros antes de la llegada del repartidor postal, debido a que el horario de entrega suele ser constante, o mantenerlos con correa si están afuera durante ese momento.
Además, se hace énfasis en no permitir que los niños reciban el correo directamente del cartero, ya que el animal podría interpretar esta acción como una amenaza. “Estos ataques son prevenibles”, insistió Theriault, en una frase que marcó el tono del mensaje institucional.

La situación fue ejemplificada con el testimonio de un trabajador postal de Blue Bell, Pensilvania. “Estaba repartiendo el correo y un perro atravesó la puerta y me mordió la muñeca. Tuve que buscar tratamiento médico”, relató Jonah Helfrich en el comunicado del USPS.
Su experiencia no es aislada. De acuerdo con la agencia, miles de trabajadores viven situaciones similares cada año en Estados Unidos, algunas con consecuencias físicas importantes, como infecciones, cirugías o periodos prolongados de recuperación. En ciertos casos, la gravedad de las lesiones ha llevado a licencias laborales o incluso jubilaciones anticipadas.
El USPS remarcó que muchos propietarios de mascotas no son plenamente conscientes del peligro que representan sus animales. “Lo que puede parecer un comportamiento inofensivo, como ladrar tras la puerta, puede escalar rápidamente a un ataque si no se toman precauciones”, advierte la entidad en su reporte.

El USPS lanzó una campaña educativa como parte de su Semana Nacional de Prevención de Mordeduras de Perros, con recursos disponibles para propietarios de mascotas, supervisores de correo y comunidades. El objetivo es reducir la incidencia de ataques y garantizar la seguridad del personal de reparto, que es clave en el funcionamiento diario del sistema postal.
“El correo es un servicio esencial, y nuestros empleados no deberían temer por su integridad física al cumplir con su trabajo”, subrayó Theriault. La campaña también incluye talleres y distribución de materiales sobre cómo leer señales de alerta en el comportamiento de los perros, la importancia de una socialización temprana del animal y la supervisión permanente del entorno donde habita.
En el marco de la campaña, la agencia recordó que en casos de reincidencia o de ataques particularmente violentos, el servicio postal puede suspender la entrega de correo en la zona afectada, lo que perjudica a toda la comunidad vecina del agresor. “Nuestra prioridad es proteger a nuestros empleados”, remarca el documento oficial.

Las estadísticas por estado y ciudad sugieren que áreas densamente pobladas con alta actividad postal presentan mayores probabilidades de incidentes. California, el estado con más ataques, también es el más poblado, con una vasta red urbana en la que miles de carteros trabajan cada día. Los Ángeles, que lidera el listado de ciudades, refleja esa tendencia.
En contraste, otras localidades como Cleveland o Kansas City, que no están entre las más grandes en población, también aparecen en los primeros puestos, lo cual indica que factores adicionales como la cultura de tenencia responsable de mascotas y la estructura del vecindario pueden jugar un rol importante.
La atención a estos datos será clave para futuras intervenciones del USPS, que ya ha comenzado a recopilar informes más detallados sobre las circunstancias en que ocurren los ataques.