
Mientras su gira Cowboy Carter se ponía en marcha, Beyoncé puso a sus dos hijas en primer plano, convirtiendo el concierto con aires country en una celebración del vínculo madre-hija.
Durante el concierto del lunes por la noche en Los Ángeles, con entradas agotadas, todas las miradas se centraron en Blue Ivy, de 13 años, quien ha bailado más desde que cautivó al público durante la Gira Renaissance, y en Rumi, de 7 años, quien debutó emocionada sobre el escenario. Puede que la comunidad Beyoncé haya visto crecer a las hijas de Beyoncé desde la distancia, pero los fans en el SoFi Stadium y en línea se llenaron de orgullo al ver a las hermanas alcanzar su máximo potencial en el escenario.
La multitud rugió cuando las niñas, cuyo padre es el esposo de Beyoncé, Jay-Z, se acurrucaron junto a su madre en un momento conmovedor durante la canción “Protector”, en la que participa Rumi.
“Y te guiaré por ese camino si te pierdes/ Nací para ser protectora”, cantó Beyoncé, mientras Rumi la envolvía en un abrazo y Blue Ivy las abrazaba a ambas. “Aunque sé que algún día brillarás por ti misma/ Seré tu proyector”.

Al terminar la canción y mientras los tres caminaban hacia adelante, Rumi, sin poder contener la alegría, empezó a dar saltos con sus brillantes botas vaqueras y saludó al público con una sonrisa de oreja a oreja. Bey se contuvo, pero finalmente se detuvo a mitad de la canción cuando Rumi se giró para abrazarla. La interacción parece muy típica de Rumi, quien saludó a su madre desde el público durante la última gira. (Beyoncé estaba ensimismada y no reaccionó).
Blue Ivy aumentó su tiempo en el escenario durante el Cowboy Carter Tour, dejando en claro cuán rápido ha mejorado como artista desde su debut cuando tenía 11 años durante un espectáculo del Renaissance en mayo de 2023 en París.
Blue se veía nerviosa durante esa actuación y parecía falta de energía durante las coreografías de “My Power” y “Black Parade”, lo que le generó críticas en línea. Pero siguió bailando y se convirtió en uno de los momentos más destacados del espectáculo, a medida que se sentía más cómoda en el escenario y sus movimientos se volvían más limpios y enérgicos.
Esta vez, con la gira Renaissance y el espectáculo de medio tiempo de la NFL “Cowboy Carter” de Beyoncé en su haber, se viralizaron videos de ella pavoneándose en el escenario con un atuendo granate para “Deja Vu” y bailando al frente con un traje estampado de periódico durante “America Has a Problem”. Algunos comentaristas quedaron atónitos, comparando a Blue con Sasha Fierce (el álter ego de Beyoncé en su tercer álbum) y con Beyoncé de la era Destiny’s Child.
El final del concierto conectó con el lema de Bey “la línea de sangre en primera línea” con un videomontaje repleto de fotos familiares. Un momento especialmente llamativo que apareció en pantalla fue el de Beyoncé con su chaqueta morada en los Video Music Awards de 2011, revelando que estaba embarazada de Blue.
(c) 2025, The Washington Post