La confirmación de que Lady Gaga se incorporará al elenco de la esperada secuela de El diablo viste a la moda 2 generó una ola de entusiasmo en la industria cinematográfica y entre los seguidores de la cultura pop.
La artista estadounidense, reconocida por su versatilidad y su influencia en la moda, compartirá pantalla con Meryl Streep, Anne Hathaway y Emily Blunt, quienes regresan a sus recordados papeles en una producción que ya inició su rodaje y cuyo estreno mundial está previsto para el 1 de mayo de 2026.

Aunque aún no se reveló el papel que interpretará Lady Gaga, su incorporación ha despertado especulaciones y expectativas que se reflejan en la conversación global sobre la película.
La noticia, confirmada por medios internacionales como la revista Variety, se volvió tendencia en redes sociales, apenas se hizo pública.

Lady Gaga, quien recientemente ofreció una serie de conciertos en Londres como parte de su gira The Mayhem Tour, fue vista en Milán durante la filmación de algunas escenas, lo que incrementó la expectación sobre su participación.
La cantante de Just Dance se suma a un elenco de lujo que incluye, además de las protagonistas originales, a Stanley Tucci, quien regresa como Nigel Kipling, y a nuevas figuras como Simone Ashley, Helen J. Shen, Conrad Ricamora y el comediante Caleb Hearon.

Además, Tracie Thoms y Patrick Brammall también forman parte del reparto, ampliando la diversidad de personajes en esta segunda entrega.
El proceso de rodaje llamó la atención tanto de la prensa especializada como de los fanáticos. Las cámaras recorrieron ciudades emblemáticas como Milán, Londres y Nueva York, escenarios que evocan el glamour y la sofisticación del universo de la moda.

Anne Hathaway, en su regreso como Andy Sachs, lució una variedad de atuendos de reconocidos diseñadores, desde un vestido de estilo vitral de Gabriela Hearst hasta conjuntos de Jean-Paul Gaultier y accesorios de Jemma Wynne y Marlo Laz.
Meryl Streep reapareció como la imponente Miranda Priestly, con estilismos que refuerzan su estatus de ícono, mientras que Emily Blunt renovó su personaje, Emily Charlton, con un nuevo corte de cabello.
El rodaje incluyó escenas cargadas de nostalgia y momentos que sugieren una evolución en la historia, como la posible presencia de un funeral, según imágenes que se filtraron durante el proceso de grabación.

En cuanto a la trama, la sinopsis publicada en la página de IMDB anticipa una confrontación entre Miranda Priestly y Emily Charlton, ahora convertida en ejecutiva rival.
La historia se desarrolla en un contexto de crisis del periodismo impreso, con Miranda acercándose a la jubilación y ambas luchando por mantenerse relevantes en un entorno cambiante.
La secuela retoma el universo creado por la novela homónima de Lauren Weisberger, explorando los desafíos y rivalidades en el competitivo mundo de la moda y los medios.

El impacto cultural de El diablo viste a la moda sigue vigente casi dos décadas después de su estreno en 2006. La película original, dirigida por David Frankel, recaudó más de USD 326 millones a nivel mundial y se consolidó como un fenómeno tanto en taquilla como en la crítica, según datos de EFE.
Inspirada en la novela de Weisberger, la cinta dejó una huella imborrable con frases, looks y escenas que se han convertido en referentes del cine y la moda.

Luego de que la noticia haya salido a la luz, los fans de la película comentaron sus expectativas en torno a la incorporación de Lady Gaga, generando debates y teorías sobre el papel que podría desempeñar la artista.
La combinación de moda, poder y un elenco estelar elevó la anticipación por el estreno, mientras las imágenes del rodaje y los detalles filtrados alimentan la conversación global.