
Angelina Jolie ha mantenido una trayectoria marcada por la transparencia al hablar sobre su orientación sexual.
Con una carrera consolidada en Hollywood, donde ha recibido varios reconocimientos, incluida una estatuilla del Oscar por Inocencia interrumpida, la actriz también destacó por su disposición a tratar abiertamente temas personales.
En 2003, durante una entrevista con la periodista Barbara Walters, Jolie respondió de manera directa cuando se le preguntó si era bisexual.
“Por supuesto. Si me enamorara de una mujer mañana, ¿sentiría que está bien querer besarla y tocarla? ¿Si me enamorara de ella? ¡Absolutamente! ¡Sí!”, sostuvo por ese entonces.

Esta declaración capturó la atención pública y fue ampliamente replicada, convirtiéndose en una de las afirmaciones más directas de una figura de su nivel sobre la atracción por hombres y mujeres.
La confesión no fue un hecho aislado en su vida pública. A lo largo de los años, Angelina Jolie profundizó sobre su historia personal, relatando en entrevistas anteriores la importancia de ciertos vínculos y experiencias.
En una conversación de 1997 con la revista Girlfriends, la actriz relató su relación con la modelo Jenny Shimizu, a quien conoció en el rodaje de Foxfire.
Sobre esa experiencia, Jolie afirmó: “Me enamoré de [Shimizu] en el primer segundo que la vi. Probablemente me habría casado con Jenny Shimizu si no me hubiera casado con mi esposo”, haciendo referencia a su entonces matrimonio con Jonny Lee Miller.

Allí mencionó el proceso personal de autodescubrimiento que vivió durante ese período: “En el set comencé a entender cosas de mí misma, a darme cuenta de que me atraen tanto mujeres como hombres”.
Desde ese momento, abordó la bisexualidad con naturalidad, evitando etiquetas rígidas y expresando afinidad tanto hacia “chicas varoniles” como hacia “chicos afeminados” en distintas ocasiones.
Aunque durante años su vida sentimental estuvo asociada principalmente a relaciones con hombres, como Billy Bob Thornton y Brad Pitt —con quien compartió seis hijos, tres biológicos y tres adoptados—, la artista nunca ocultó que también había mantenido relaciones y vínculos afectivos con mujeres.

En el marco de la promoción de Maléfica: dueña del mal, Angelina Jolie participó en entrevistas junto a sus compañeras de elenco, Michelle Pfeiffer y Elle Fanning.
Durante una de esas conversaciones, se le consultó acerca de sus enamoramientos de adolescencia. La actriz primero nombró a Marlon Brando en su papel en Un tranvía llamado Deseo, pero después giró la charla hacia su compañera de reparto.
“Te amaba en Grease”, le dijo directamente a Michelle Pfeiffer, recordando su admiración por la actriz cuando interpretó a Stephanie Zinone en Grease 2.
Al ser consultada por Pfeiffer si había sido su enamoramiento adolescente, Jolie reafirmó: “Definitivamente me gustabas cuando cantaste ‘Cool Rider’. Eras muy atractiva”.

Además, añadió entre risas que también se sintió cautivada por Pfeiffer en Caracortada.
Cabe destacar que, en el cine, Angelina Jolie ha tenido también roles queer donde ha compartido escenas románticas con otras actrices. Tal es el caso de Inocencia interrumpida (1999) y el beso que compartió con Winona Ryder.
Poco antes protagonizó Gia (1998), film basado en la vida de la modelo estadounidense Gia Carangi, cuya orientación sexual fue materia de interés público debido a sus relaciones con hombres y mujeres a lo largo de su carrera.
Frente a las cámaras, Jolie actuó escenas amorosas junto a Elizabeth Mitchell, quien interpretó a Linda, una mujer vinculada románticamente a Gia.