Por primera vez desde 1978, el público tendrá acceso a una proyección de la versión original de Star Wars (1977), sin modificaciones ni añadidos digitales.
El evento tendrá lugar en el Reino Unido durante el Festival de Cine sobre Cine del Instituto Británico de Cine (BFI), que se celebrará en del 12 al 15 de junio. Se trata de una copia en Technicolor, una de las pocas que aún existen, y su proyección marcará un hito para el cine de ciencia ficción y los seguidores de la saga.
Según informó The Hollywood Reporter, la copia estuvo almacenada durante más de cuatro décadas a una temperatura de -5 °C del BFI en Warwickshire, lo que garantiza un estado de conservación excepcional.
Esta será la primera vez desde diciembre de 1978 que se exhibe públicamente esta versión en salas, ya que desde 1981 las proyecciones correspondieron exclusivamente a las llamadas “Ediciones Especiales”.
El largometraje dirigido por George Lucas se convirtió en un fenómeno cultural desde su estreno en 1977. Sin embargo, con el paso del tiempo, la versión original que se mostró en cines fue modificada en distintas ocasiones.
A partir del reestreno en 1981, Lucas inició una serie de ajustes que dieron lugar a distintas versiones del Episodio IV, rebautizado entonces como Star Wars: Episodio IV - Una nueva esperanza.
Estas Ediciones Especiales incorporaron cambios en efectos visuales, diálogos y escenas completas. Algunos de estos retoques fueron sutiles, pero otros generaron un fuerte rechazo por parte de numerosos fanáticos.

Entre los más criticados se encuentra la inclusión de una escena entre Han Solo y Jabba el Hutt, añadida con tecnología digital. A pesar de intentos por mejorarla con el tiempo, la secuencia continúa siendo motivo de controversia.
Otros cambios notables incluyeron la alteración de quién dispara primero en la cantina de Mos Eisley y la incorporación de criaturas digitales, como los dewbacks aullando.
Estas decisiones llevaron a comparaciones con programas de cirugía estética mal ejecutada, como Botched, según la crónica publicada por The Hollywood Reporter.
George Lucas fue enfático en su rechazo a exhibir la versión original sin alteraciones. En una entrevista concedida a Associated Press, el cineasta declaró que “la Edición Especial, esa es la que quería que estuviera disponible. La otra película está en VHS, por si alguien la quiere”.
Asimismo, manifestó que no planeaba restaurarla debido al elevado costo económico y a que, desde su punto de vista, “ya no existe”.

En la misma entrevista, Lucas explicó que, “es como si esta fuera la película que quería que fuera, y lamento que hayan visto un film a medio terminar y se hayan enamorado de ella. Pero quiero que la película se vea tal como yo la concibo. Soy yo quien tiene que asumir la responsabilidad”.
Además, agregó: “Si me van a tirar piedras, me las van a tirar por algo que amo en lugar de por algo que creo que no está terminado”.
Estas declaraciones reflejan la visión del director sobre la evolución de su obra, en la que las versiones modificadas representan su intención artística definitiva.
La copia que se proyectará en el BFI forma parte de un reducido número de ejemplares en Technicolor que sobrevivió al paso del tiempo.
La exhibición fue posible gracias a una negociación con Disney y Lucasfilm, que permitió dos únicas funciones consecutivas durante la noche inaugural del festival. Una portavoz del BFI confirmó al medio británico que se obtuvo el permiso oficial, en el marco de una colaboración con ambas compañías.
The Telegraph subrayó que esta será la primera vez en décadas que una audiencia podrá ver la versión original de Star Wars en una sala de cine de forma legal.
James Bell, curador principal del archivo de ficción del BFI, definió la oportunidad como “un logro” y destacó a The Telegraph el estado excepcional de la copia: “Ver los rayos láser del Imperio en rojo brillante en lugar de magentas descoloridos fue realmente emocionante”.
Dada la exclusividad del evento, se espera una alta demanda. Según comentó Bell: “probablemente podríamos haber vendido todo el festival con proyecciones de Star Wars“.
El anuncio de esta proyección generó una notable expectativa entre seguidores de la saga y especialistas en preservación cinematográfica.
La posibilidad de acceder a la película en su estado original y en condiciones óptimas de conservación representa una oportunidad poco frecuente en la historia del cine popular.
No se anunciaron, hasta el momento, eventos similares en otras partes del mundo. Sin embargo, el interés generado por esta exhibición podría influir en futuras decisiones de Lucasfilm y Disney sobre nuevas proyecciones públicas de la versión de 1977.