Carlos Tevez habló después de largo rato e hizo público un deseo que persigue desde hace tiempo: tener su partido despedida en la Bombonera. Así como Juan Román Riquelme dio el adiós definitivo con los pantalones cortos en el año 2023, ahora el Apache pretende protagonizar su homenaje en el mediano plazo y, aunque aclaró que todavía no tuvo charlas ni reuniones para llevarlo a cabo, seguramente se comunicará con el presidente de Boca Juniors en la proximidad para llevarlo a cabo. Desde la dirigencia xeneize tienen tomada una postura respecto al tema.
“Me tengo que juntar con Román (Riquelme) y decirle del tema de la cancha. Está todo dando vueltas en la cabeza. Hay que poner la idea y, si la quiero hacer, es sentarme con Román”, declaró Tevez en Olga, donde además remarcó que tiene como posible fecha para el evento el fin de año de este 2025, ya que de esa forma evitaría que se mezcle con el calendario político del club, recordando que habrá elecciones a fines de 2027.
Aunque Carlitos no jugó políticamente en los últimos comicios en Boca y se enfocó exclusivamente en su carrera como director técnico, pese a ser tentado por un Mauricio Macri que fue compañero de fórmula de Andrés Ibarra, las diferencias con Riquelme siempre existieron. Incluso cuando Román le renovó el contrato como futbolista en 2020 hasta su retiro profesional al año siguiente.
“Si él llama y nos pide de hacerlo, lo va a poder hacer”, le confiaron a Infobae desde el Boca Predio. Las diferencias políticas, amistades y egos quedarán a un lado para la organización de este esperado evento para los fanáticos boquenses.

El Apache entiende que el partido homenaje en la Bombonera sería “cerrar un ciclo” que se inició con su debut en Primera en el año 2001, continuó con su retorno en 2015 después de jugar una final de Champions League con la Juventus y concluyó en 2021 con un tercer período luego de un intervalo en el fútbol chino. “Lo voy a hacer, pero hay que fijarse cuándo, en qué momento, porque no es fácil”, mencionó también el ídolo azul y oro. Y ese no es un detalle menor, ya que hasta el propio Riquelme, inclusive cuando ya estaba en funciones como dirigente de la institución de la Ribera, tardó tres años en hallar un hueco en el calendario para convocar a grandes figuras del fútbol y jugar por última vez.
Por cuestiones organizativas y en el afán de contar con las grandes estrellas con las que compartió vestuario, Tevez apunta a volver a pisar la Bombonera para su despedida a fines de 2025. El calendario juega a su favor, ya que Boca no competirá en torneos internacionales con la excepción del Mundial de Clubes de junio y el Torneo Clausura pactado para el segundo semestre se disputará hasta principios de diciembre. El propio Carlos aseguró que intentará que participen del partido Lionel Messi y Cristian Ronaldo: “Los juntamos. Los voy a buscar yo”.
Por otra parte, si bien en Boca tienen prácticamente todo acordado con los estudios de ingenieros y arquitectos que llevarán a cabo la ampliación de la Bombonera, todavía no existe una fecha puntual para el comienzo de la obra. Extraoficialmente a este medio le adelantaron que el anuncio será recién en 2026, por lo que los trabajos en el Alberto J. Armando no se pisarían con el homenaje a Tevez siempre y cuando se realice a fines de este año.
“No voy a ser presidente de Boca. No está en mi cabeza, primero porque no estoy preparado. Segundo, soy entrenador. Me quieren subir a un lugar político al que no voy a subir porque no estoy preparado. Tenés que saber ubicarte”, fue otra de las resonantes frases de Carlitos para evitar polemizar sobre una teórica candidatura en Boca de cara al 2027. No obstante, en los pasillos de Brandsen 805 hay quienes creen que el partido homenaje de Tevez podría simbolizar el inicio de una campaña con Macri por detrás. No se puede soslayar que la fiesta de CT se daría justo sobre el cierre del segundo año consecutivo en el que Boca no disputa la Copa Libertadores y mientras Riquelme afronta uno de los puntos más críticos de su gestión a nivel deportivo por ese motivo.

Cuando todavía no estaban definidos los nombres de la oposición de Boca previo a las elecciones de fines de 2023 y se rumoreaba que Tevez podría irrumpir en escena, Riquelme había sido tajante en una entrevista televisiva: “Vamos a ganar 90 a 10 y, si Tevez va del otro lado, ganamos 85 a 15″. Finalmente el Apache se inclinó por su carrera como entrenador y quedó al margen de las urnas sin siquiera expresar apoyo público para con Ibarra, candidato impulsado por Macri, como sí hicieron otros ex jugadores como Guillermo Barros Schelotto y Martín Palermo, este último anunciado como entrenador elegido si la oposición le quitaba el sillón presidencial a Román.
En octubre del año pasado, Tevez manifestó públicamente que “no se identificaba” con la actual dirigencia y cargó contra la figura de Riquelme: “Yo estuve en Boca cuando esta gestión nos pegaba duro si nosotros no hacíamos un buen papel en la Libertadores, no clasificábamos o quedábamos afuera. Siempre estuve en contra de eso. Uno no ve bien al club y es muy fácil pegarle en este momento”. En la nota de ayer, se limitó al referirse al plano futbolístico del Xeneize y no ocultó su deseo futuro de ser entrenador en el club de sus amores.
Riquelme y Tevez no son amigos, pero se tienen sumo respeto. Román no privará a los fanáticos de Boca de decir adiós a uno de los máximos ídolos con el aliciente posible de ver en cancha a dos astros como Lionel Messi y Cristian Ronaldo en la Bombonera. Y Carlitos prometió no embarrar la cancha en el plano político. Bajo esta tregua, este año podría gestarse un evento sin precedentes.