
Pocas series han sido tan memorables en la televisión como La familia Ingalls (Little House on the Prairie), emitida originalmente entre 1974 y 1983. Más de cuatro décadas después, los fanáticos aún recuerdan a Nellie Oleson, la niña mimada y antagonista de Laura Ingalls, interpretada por Alison Arngrim.
Sin embargo, detrás de ese personaje odiado por generaciones existe una interesante historia de creatividad y amistad que la propia actriz reveló recientemente.
En una conversación en el pódcast Little House: Fifty for 50, Alison Arngrim, ahora de 63 años, recordó cómo fue dar vida a Nellie en el episodio “La máquina parlante”, de la segunda temporada.
La trama giraba en torno a la competencia entre Laura (Melissa Gilbert) y Nellie por conquistar el corazón de Jason (Eric Shea), un niño apasionado por la ciencia.

Para impresionarlo, Nellie convencía a sus padres de comprar una “máquina parlante” —un fonógrafo que grababa y repetía sonidos—, con la que finalmente decidió ridiculizar a Laura.
Quizá pocos sabían que el director de aquel episodio fue Victor French, quien además encarnaba a Isaiah Edwards en la serie. La actriz confesó que él fue clave para que Nellie alcanzara el nivel de maldad que los televidentes recuerdan.
“Él era realmente bueno manejando cómo las cosas debían ir creciendo en intensidad”, relató Arngrim en el podcast. “Recuerdo que me decía: ‘No, más, no, más’, para llevarme hasta el límite”.
Específicamente, Arngrim no tenía diálogos en la escena en la que Nellie trama su plan para humillar a Laura, por lo que debía expresar todo con gestos.
En ese momento, French la animó a inspirarse en una referencia poco convencional: la película animada de El grinch.

“Cuando tenía que mostrar esa ‘horrible idea malvada’, pensé en el momento del Grinch cuando sonríe con su plan terrible y maravilloso”, recordó.
Pero French fue más allá.
“Yo había estado leyendo cómics de terror esa semana en el set, con hombres lobo y zombis. Y justo cuando me metí en esa energía, Victor dijo: ‘¡Piensa en tus cómics de hombres lobo!’”, narró Arngrim. El resultado fue una sonrisa siniestra y memorable que definió a Nellie. “Y él dijo: ‘Sí. Eso es’. Me animó totalmente en ese momento”.
Otro dato importante es que, a pesar de que Nellie y Laura se enfrentaban constantemente en la ficción, Alison Arngrim y Melissa Gilbert eran inseparables fuera de cámaras.

En entrevistas con PEOPLE en 2024, la intérprete en el rol de Nellie resaltó el contraste: “Aquí estamos Melissa Gilbert y yo, haciendo de enemigas mortales, golpeándonos de lunes a viernes. Y luego, los fines de semana, íbamos a dormir a casa de la otra”.
Ambas actrices se divertían tanto fuera de cámaras que incluso coreografiaban sus peleas en pantalla desde la primera temporada. “Éramos como hermanas”, subrayó Arngrim, quien reconoció que todavía sorprende a los fans ver fotos de ellas sonriendo juntas en medio de rodajes de episodios cargados de rivalidad.
Sin embargo, el éxito de Nellie como villana tuvo un costo: muchos espectadores confundían al personaje con la persona. “La gente me odiaba. Me odiaban, me odiaban”, recordó Arngrim. Incluso contó que, en un desfile navideño, alguien le arrojó una gaseosa en la cara.
Con el tiempo, aprendió a aceptar la imagen que se había grabado en la memoria de la gente y lo convirtió en parte de su espectáculo unipersonal Confessions of a Prairie Bitch.

Pronto, la historia de Laura Ingalls volverá a la pantalla chica en una nueva adaptación producida por Netflix. La plataforma confirmó en junio de 2025 que ya comenzó el rodaje en Winnipeg, Canadá, bajo la dirección de Rebecca Sonnenshine (The Boys, The Vampire Diaries).
La nueva serie ha sido descrita como “un drama familiar esperanzador, relato épico de supervivencia y una historia de origen del Oeste americano”. Entre el elenco figuran Alice Halsey, de 10 años, como Laura Ingalls; Luke Bracey como Charles Ingalls; Crosby Fitzgerald como Caroline Ingalls; y Skywalker Hughes como Mary.