
En una entrevista exclusiva con Vogue, Lauren Sánchez relató que vivió una transformación profunda —física, emocional y espiritual— durante la preparación para uno de los momentos más importantes de su vida: su boda con el multimillonario fundador de Amazon, Jeff Bezos.
La periodista de 55 años aseguró que antes de la ceremonia celebrada el pasado 27 de junio en Venecia, Italia perdió 3,5 libras (alrededor de 1,5 kilos) para poder lucir el vestido de novia.
Aunque la cifra parezca modesta, para alguien con su contextura pequeña representó un esfuerzo significativo. Para lograrlo, eliminó el alcohol y redujo al mínimo su consumo de sal.
“Me gusta la comida. La comida es una parte muy importante de la vida. ¡Soy latina!”, explicó, sin perder el buen humor.

Más allá de la dieta, Lauren Sánchez se enfocó en mantener una rutina diaria de ejercicio.
“Algunas personas meditan, yo hago ejercicio. Es algo que Jeff y yo hacemos todas las mañanas. Tomamos café, hablamos de lo que está pasando, y luego vamos al gimnasio”, detalló, subrayando cómo esta práctica fortalece tanto su salud como su conexión con el empresario de 61 años.
La boda, celebrada de forma íntima pero lujosa, contó con la presencia de grandes celebridades como Kim Kardashian, Tom Brady, Sydney Sweeney y Orlando Bloom. Tanto Jeff Bezos como Lauren Sánchez lucieron atuendos personalizados de Dolce & Gabbana.
En el caso de ella, el vestido fue una pieza única inspirada en el estilo de Sophia Loren en la película Houseboat (1958), con mangas largas, encaje delicado y 180 botones de seda en el corsé, el cual está valuado en alrededor de 300 mil dólares.

“Al principio quería un vestido moderno, sexy y simple, pero luego decidí que quería algo que evocara un momento. Algo que reflejara quién soy ahora”, explicó.
Y añadió: “Soy una persona distinta a la que era hace cinco años. He pasado por mucha terapia y eso me ha cambiado de muchas maneras. Pero en realidad es Jeff. Jeff no me ha cambiado, Jeff me ha revelado”.
Ese cambio de perspectiva se refleja no solo en su elección de vestuario, sino en su visión de la vida y aseguró que su vestido de novia cumplía con todas las características.
“Me siento segura. Me siento vista. Él me deja ser yo misma. Sophia Loren era libre y sin disculpas, y él me permite ser así”, dijo.

Sin embargo, Lauren Sánchez investigó extensamente imágenes de novias de los años 50 antes de decidirse por el estilo final.
“Vi una foto de Sophia Loren con las manos en posición de oración, vestida con encaje alto hasta el cuello, y dije: ‘Ese es el vestido’. Es muy diferente a lo que la gente espera de mí, y a lo que yo misma esperaba… pero es completamente yo”, indicó.
Cuando finalmente vio el vestido terminado por primera vez, la periodista confesó sentirse “como una princesa”. Jeff Bezos, en cambio, no vio el vestido hasta que ella caminó hacia él en el altar.