La carta escrita por un pasajero del Titanic que fue subastada por casi 400.000 dólares

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El precio inicial de laEl precio inicial de la histórica carta era de 60.000 libras. (AP Photo, File)

Una pieza histórica vinculada al trágico hundimiento del Titanic ha alcanzado un valor extraordinario en una subasta realizada en Inglaterra. Según informó The Associated Press (AP), una carta escrita por uno de los pasajeros más reconocidos que sobrevivió al desastre fue adquirida por un coleccionista privado de Estados Unidos por 300.000 libras esterlinas (aproximadamente 399.000 dólares).

Este precio superó ampliamente la estimación inicial de 60.000 libras, según detalló la casa de subastas Henry Aldridge & Son, ubicada en Wiltshire, Inglaterra.

La misiva, fechada el 10 de abril de 1912, fue redactada por Archibald Gracie, un pasajero de primera clase que se encontraba a bordo del famoso transatlántico. En el texto, dirigido al tío abuelo del vendedor, expresó su impresión inicial sobre el navío, describiéndolo como “un buen barco”, aunque añadió que prefería esperar hasta el final de su viaje para emitir un juicio definitivo sobre él.

La carta fue adquirida porLa carta fue adquirida por un coleccionista privado de Estados Unidos. (Henry Aldridge & Son vía AP)

Esta carta es considerada un documento especial, ya que se cree que es el único ejemplo conocido de una correspondencia escrita por Gracie mientras estaba a bordo del Titanic. Este hecho, sumado a la relevancia histórica del autor, contribuyó al elevado precio alcanzado en la puja. El subastador Andrew Aldridge incluso afirmó que se trata de “una pieza excepcional de calidad de museo”.

Durante una entrevista con la BBC, Aldridge dijo que esta era una de las mejores cartas de su tipo que se conocen, ya que no solo estaba escrita por “uno de los pasajeros de primera clase más importantes del Titanic”, ya que también contenía “una línea más profética”: “Es un hermoso barco, pero esperaré el final de mi viaje antes de juzgarlo”.

Archibald Gracie es recordado como uno de los sobrevivientes más destacados del hundimiento del Titanic, ocurrido el 15 de abril de 1912. Tras el naufragio, se convirtió en una figura clave en la recopilación de testimonios y detalles sobre el desastre, publicando posteriormente un libro que documentaba los eventos ocurridos durante la tragedia, según reportó AP.

El precio final de laEl precio final de la carta fue de casi 400.000 dólares. (Henry Aldridge & Son vía AP)

Abordó el legendario transatlántico el 10 de abril de 1912. Le fue asignado el camarote C51 de primera clase y, aunque, su libro es considerado como uno de los relatos más detallados que existen de la fatídica noche en que se hundió la embarcación frente a Terranova tras chocar con un iceberg, no logró recuperarse del todo de la hipotermia y falleció por complicaciones de la diabetes a finales del mismo año.

El remitente es uno deEl remitente es uno de los sobrevivientes más destacados del hundimiento. (Henry Aldridge & Son vía AP)

La venta de esta carta no solo destaca por su precio, sino también por el interés que sigue generando el Titanic más de un siglo después de su hundimiento. La cifra alcanzada en la subasta refleja la importancia histórica y emocional que los objetos relacionados con el transatlántico tienen para coleccionistas y entusiastas de todo el mundo.

El Titanic era considerado en su momento el barco más grande y lujoso jamás construido. Sin embargo, su viaje inaugural terminó en tragedia cuando chocó contra un iceberg en el Atlántico Norte, provocando la muerte de más de 1.500 personas.

El interés por los objetos relacionados con el Titanic ha permanecido constante a lo largo de los años, y las subastas de artículos vinculados al navío suelen atraer la atención de coleccionistas de todo el mundo.

La carta de Gracie, según reportó AP, tenía un matasellos de Queenstown, Irlanda, que fue una de las dos paradas que hizo la embarcación antes de undirse.

Este es solo uno de los muchos objetos que han sido subastados en relación con el Titanic, aunque su carácter único y su conexión directa con un sobreviviente la convierten en una pieza especialmente valiosa.

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