Irán se abre a negociar su programa nuclear y espera diálogo con EE.UU.

El gobierno de Irán expresó su disposición a retomar conversaciones sobre su programa nuclear, e incluso dejó abierta la posibilidad de establecer un diálogo directo con Estados Unidos. Así lo confirmaron este viernes los ministros de Exteriores de Francia, Reino Unido, Alemania y la alta representante de la Unión Europea para Política Exterior, tras una reunión en Ginebra con el canciller iraní Abás Araqchí.

“Irán ha mostrado su voluntad de continuar las discusiones sobre su programa nuclear y esperamos una apertura del diálogo, incluso con Estados Unidos”, afirmó el ministro francés de Asuntos Exteriores, Jean-Noël Barrot, citado por la agencia de noticias Efe.

El encuentro tuvo lugar en un contexto de tensiones crecientes entre Irán e Israel. Aunque Araqchí respaldó la vía diplomática, condicionó los avances a que cesen los ataques israelíes contra territorio iraní.

“Estamos listos para considerar la diplomacia una vez que la agresión se detenga y el agresor sea juzgado”, declaró.

Durante la reunión, las partes también abordaron asuntos más amplios además del tema nuclear. El canciller británico David Lammy, dijo “Irán no puede tener un arma nuclear”.

Además, instó a las autoridades iraníes a mantener abierto el canal de comunicación con Estados Unidos.

Una declaración conjunta de los países europeos reiteró su “firme compromiso con la seguridad de Israel” y advirtió que el programa nuclear iraní, tal como está hoy, “no es creíble” como iniciativa civil.

Los europeos también felicitaron a Estados Unidos por sus esfuerzos en favor de una salida negociada.

Fuentes diplomáticas señalaron que el canciller británico llevó a la reunión un mensaje del gobierno estadounidense, que propone a Irán renunciar por completo al enriquecimiento de uranio como condición para reactivar las negociaciones.

Actualmente, Teherán enriquece uranio al 60%, un nivel muy por encima del límite permitido en el acuerdo nuclear de 2015, del que Estados Unidos se retiró en 2018 durante la primera presidencia de Donald Trump.

El mandatario republicano, ahora de vuelta en el poder, ha dicho que se dará dos semanas para decidir si involucra militarmente a Estados Unidos en el conflicto entre Israel e Irán. Por ahora, las potencias europeas apuestan por mantener abierta la vía diplomática y evitar una escalada en Medio Oriente.

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